La guerra civil pondría fin a la fabricación de las carabinas TIGRE, PAZ, JUPITER, ONENA y UNION, no así la de las DESTROYER, que se mantuvieron producidas por la firma Ayra Durex, sucesora de Isidro Gaztañaga.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Mi amigo Héctor J. Meruelo, cuenta en su Colección con varios ejemplares de carabina DESTROYER, entre ellos, del 2º modelo, uno probado en 1958 (D*1) para cartuchos 9 mm Bergmann, otro probado en 1970 (O*1), para cartuchos .38 SUPER, y otro, probado en 1976 (U*1), para cartuchos 9 mm Parabellum.
Carabina DESTROYER, primer modelo o “Md.1921”. Probablemente, la patente obtenida por Gaztañaga en 1924 sería “partida de nacimiento” del segundo modelo de carabina DESTROYER, a alimentar con cargadores similares a los de las pistolas semiautomáticas tipo Browning, con alojamiento o depósito que constituye prolongación del arco guardamonte, como los Mauser de repetición precedentes del Mod. 1893.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Carabina DESTROYER, segundo modelo. Al iniciarse la Dictadura, tras el Pronunciamiento en Barcelona del General Primo de Rivera (1923), el Somatén dejó de ser exclusivamente catalán y se hizo extensivo a todo el territorio nacional, con el consiguiente incremento de la demanda de “carabinas para somatenistas” y a la oferta de las DESTROYER se sumó la de las TIGRE, LOBO, PAZ, JUPITER, ONENA y UNION.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]La carabina LOBO, se incluye en el catálogo de la firma “Rufino Sande, Gaztelurrutia y Cía”. La carabina LOBO tiene un sorprendente parecido con la Ilustrada en la “patente Génova”.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]La sociedad “Rufino Sande, Gaztelurrutia y Cía” registró la marca EL LOBO en 1912, contaba en Eibar con un pequeño taller dedicado con preferencia a las armas de fuego largas – escopetas y carabinas de jardín – si bien comercializaba todo tipo de armas de fuego. No he localizado a su nombre alguna patente por la carabina que ofertaba, de la que tampoco tengo visto ejemplares.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]LA CARABINA “MONTSERRAT” Y SUS COMPETIDORAS, EN EL EQUIPO DEL SOMATEN
La Colección del Museo Militar del Castillo de Montjuïc, contaba con tres ejemplares de la carabina MONTSERRAT, con números de fabricación 291, 465 y 497 respectivamente; tres ejemplares son muchos, cuando la producción total pudo no superar las 500 unidades.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Mediado el siglo XX, aquél que se interesara por la carabina MONTSERRAT en el establecimiento propiedad de D. Gustavo Castells, veía como éste se exaltaba, explicando como su padre había sido víctima de la desvergüenza del industrial al que contrató la fabricación de estas carabinas, que tras la entrega de una partida inicial, pretendió variar las condiciones del contrato, y para incumplirlo llegó a provocar un incendio en sus talleres, con el fin de alegar causa de fuerza mayor.
Para colmo, en julio del 36, cuando el alcantarillado de Barcelona se llenó de armas de fuego - como luego ocurrió en enero del 39 - las pocas carabinas que restaban en su poder casi les cuestan la vida, al ser consideradas armas destinadas a la sublevación.
Resumiendo, que cuando visité a D. Gustavo en su establecimiento, de la carabina MONTSERRAT sólo guardaba tres cosas:
Un mal recuerdo, la memoria descriptiva correspondiente a la patente de la carabina de repetición sistema “Génova” y el folleto propagandístico de la carabina MONTSERRAT , del primero me hizo partícipe, y tuvo la amabilidad de obsequiarme con los documentos que poseía .
El folleto de la carabina MONTSERRAT, la indica proyectada por el Coronel D. Juan Génova, como arma a utilizar por el Somatén, así como que su inventor dirigió la construcción del ejemplar de muestra a la Fábrica de Oviedo, cedió los derechos de su patente a D. Genaro Castells y seguidamente falleció.
El coronel D. Juan Génova e Iturbe (1858-1920), natural de Zaragoza, máxima autoridad española del momento en armamento portátil, residía en Barcelona al igual que D. Genaro Castells, hijo del industrial Bernardo Castells, que en 1834 fundó la empresa de efectos militares “Al Ejército Español”.
Al ser heredada ésta por Genaro, tomó la denominación de “Hijo de B. Castells”.Tras obtener los derechos sobre la patente Génova, Genaro Castells “ Cabo del Distrito del Somaten de La Salud ”
( barrio de Barcelona) registró la marca “ Montserrat ” ( “ La Moreneta ,Virgen patrona del Somaten), para comercializarla y contrató su construcción al industrial armero Eibarrés Isidro Gaztañaga, fabricante de las pistolas y revólveres comercializados con la marca “Destroyer”, registrada por él en 1914, tras finalizar su asociación con Juan Esperanza , (Gaztañaga y Esperanza, 1911-14).
El Somaten era una secular institución rural catalana formada por paisanos, que, convocados por las campanas a toque de arrebato, acudían armados con las escopetas de caza de que disponían.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Durante los siglos XVIII y XIX, la represión de partidas de bandoleros
constituyó la principal causa de llamada al Somaten, pero a inicios del XX, con la industrialización extendida por las comarcas, comenzaron a verse implicados en los desordenes originados por “el obrerismo anarquista”.
En Barcelona, ya denominada por el mote “la ciudad de las bombas”, la represión de los desórdenes sociales la llevaban a cabo la policía, la Guardia Civil y las tropas del Ejército de guarnición en la plaza, que intervenían equipadas con todo su armamento, incluidas ametralladoras y piezas de artillería.
Así ocurrió en la denominada “semana trágica” - julio de 1909 - que la guarnición de Barcelona hubo de ser reforzada con tropas procedentes de Valencia, Zaragoza, Burgos y Pamplona y en las huelgas generales que se sucedieron a continuación.
A partir de la “revolucionaria” del año 1917 y sobre todo tras la de 1919, conocida como “la Canadiense” – la “ Barcelona Traction and Light Power ”, que abastecía de energía eléctrica a la ciudad , se encontró prácticamente en estado de guerra, con enfrentamientos continuos entre los pistoleros de la CNT, el sindicato anarquista y los de los Sindicatos Libres. Fue entonces, que las pistolas calibre 7,65 mm. de la Star pasaron a denominarse “sindicalistas”.
En la citada huelga de “la Canadiense”, que se prolongó durante un mes y medio y a la que se sumaron los obreros del gas y del textil,
el “Fuera de Juego” impuso sustituir el personal obrero por militares, sucediéndose entonces los apagones – cortes de luz eléctrica – que aterrorizaron a la burguesía barcelonesa, haciéndola sentirse desamparada ante una inminente revolución bolchevique de la que
se presumían primeras víctimas.
Fue por ello que las autoridades militares decidieron el establecimiento en la ciudad del Somatent Armat de Catalunya, que de entrada reunió 8.000 ciudadanos “de orden”, decididos a colaborar con las autoridades cuando la situación lo requiriera.
Este Somaten Armado de Cataluña, al que inicialmente le entregaron fusiles Remington, de desecho del Ejército, se distinguía en acción por incluir, en su atuendo burgués, inicialmente un brazal identificativo y posteriormente un cinto de cuero con vistosa hebilla de latón, decorada con las armas de Cataluña y el lema “Pau, pau, sempre pau” (Paz, paz, siempre paz), portando en la solapa una insignia con el mismo emblema y luciendo los colores de la Bandera Española en el portafusil.
La creación de estos somatenes barceloneses, abrió el mercado de las “carabinas para somatenes”, más adecuadas para su utilización en el ámbito ciudadano que los fusiles militares.
La carabina proyectada por el coronel Génova constituía el arma de repetición ideal, que en 1.920 sólo competía en el mercado con las carabinas monotiro fabricadas en Eibar, con obturador de rotación retrocarga sistema Remington, para cartuchos calibre 44 WCF y las de repetición, Winchester, de igual calibre, que al ser de importación tenían un elevado precio de venta. No cabe duda que en 1.920 la carabina Montserrat constituía lo que se dice “un número de lotería premiado”, algo sin duda excesivo para quien pretendió hacerlo efectivo.
El fallecimiento del coronel Génova y las diferencias entre la
carabina descrita en la memoria de la patente y la MONTSERRAT, disuadirían a D. Genaro a pleitear. ¿A quién atribuir estas diferencias? .
A Genaro Castells seguro que no, pero es posible que a Gaztañaga tampoco , en mi opinión las introdujo el mismo Génova, durante el tiempo que dirigió, en Oviedo, la construcción del ejemplar de muestra.
CARABINA DESTROYER
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]La carabina Destroyer 1921 es una de las armas con más peso y tradición en la historia de España. Su vida siempre estuvo unida a la de las fuerzas del orden españolas, quienes gracias a su manejabilidad, ligereza y mínimo retroceso, encontraron en la Destroyer a una infatigable compañera de batallas.
La producción de esta legendaria arma arranca en el año 1921 y se ubica en la prolífera localidad de Eibar. Allí, en pleno corazón del País Vasco, nació una de las carabinas más famosas e importantes de la historia armamentística española. Un arma que con el paso de los años se ha convertido en auténtico objeto de deseo de los principales coleccionistas internacionales.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]La firma Gaztañaga y Compañía fue la encargada de producir las primeras unidades de la carabina Destroyer, un arma nacída con el objetivo de convertirse en la sustituta de “El Tigre”, un rifle de palanca similar al Winchester M1892 y que en aquel entonces era utilizado por los miembros de la Guardia Civil.
Esta fue la primera etapa de las carabinas Destroyer, unos agitados años marcados por el conflicto bélico que azotó a España y por la Segunda Guerra Mundial.
Precisamente, justo después de la conclusión de este conflicto internacional de nuevo otra firma eibarresa, en esta ocasión Ayra Durex, emprende la segunda etapa de producción de la carabina Destroyer. Ayra Durex realiza importantes modificaciones respecto al diseño anterior, unos cambios que ayudan a mejorar notablemente el producto final.
En este sentido, la carabina fabricada por Gaztañaga y Cía. presentaba un diseño bastante simple, con un sistema de cerrojo muy similar al empleado en una escopeta de cerrojo. De hecho, estos modelos de Destroyer sólo disponían de un único dispositivo de cierre, que era el propio pestillo del cerrojo.
Así pues, las mejoras introducidas por los ingenieros de Ayra Duria fueron realmente notables. En este sentido, se eliminó el antiguo sistema de cierre y se copió el mecanismo de acción del Mauser 93. Los trabajadores de Ayra Durex también añadieron a la nueva Destroyer un extractor tipo Mauser y redujeron las dimensiones del cerrojo. Estos cambios permitieron disponer de un arma mucho más rápida, manejable y eficaz.
Dentro de los elementos propios de la carabina Destroyer, sobresalen sus dos tipos de miras. Por un lado, esta legendaria arma dispone de una mira de combate con forma de V para disparos a 25-50 metros; mientras que por otro lado, también cuenta con otra alza ajustable para tiros desde 100 hasta 700 metros.
Otro aspecto característico y totalmente diferenciador de la carabina Destroyer es su calibre. Recámarada para albergar cartuchos del calibre 9 Largo (9x23mm), utilizaba la misma munición y los mismos cargadores que las armas cortas oficiales de las fuerzas del orden. Este hecho facilitaba enormemente el trabajo de los cuerpos de seguridad de la época, quienes tenían a su disposición dos tipos de armas diferentes pero que empleaban el mismo calibre.
Precisamente,esta peculiaridad de estar calibrada para el 9 mm.Largo (también denominado 9 Bergmann) le confiere cierto halo de exclusividad, rareza o extravagancia, que despierta el interés de los más apasionados coleccionistas internacionales de armas.
Los cargadores de serie que acompañaban a la carabina Destroyer tenían capacidad para almacenar hasta un total de 6 cartuchos. A pesar de que la mayoría de estas armas estaban calibradas para el 9mm Largo, también se crearon algunos ejemplares en calibre .38 Colt, los cuales contaban con cargadores de mayor capacidad.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]En la recámara de la carabina Destroyer también entran cartuchos de otros calibres como el 9mm Luger, el 9mm Steyr, o el 9mm Browning Long. Todos ellos pueden funcionar en el arma original, aunque esta práctica puede ser muy peligrosa para el tirador, debido a la excesiva presión que puede acumularse en el cañón. Como en el resto de armas de fuego, está totalmente desaconsejado disparar con la Destroyer con otra munición que no sea el calibre 9mm Largo.
Actualmente, no son cartuchos tan difíciles de encontrar y su recarga resulta relativamente sencilla con vainas de tipo boxer. Con un peso que apenas alcanza los 3 kilogramos, un retroceso fácilmente soportable, una munición efectiva, y un mecanismo de acción tipo Mauser, la carabina Destroyer es un arma precisa y fiable. Una carabina con mucha historia a sus espaldas que desea seguir “destruyendo” dianas en los campos de tiro de todo el mundo.
Un servidor cuenta con una en perfecto estado , asimismo conserva otros dos ejemplares de colección de esta serie de carabinas , la ONENA de STAR y la UNION .
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Hay otra anécdota que viene a colación en este hilo y es que algún aventado americano quería un arma silenciada en la guerra del Vietnam y no se le ocurrió otra cosa que preparar una Destroyer al efecto .
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Unos dicen que hubo algunas del .45 ACP , por ser un cartucho subsónico , pero a mi no me cuadra por su cerrojo , así que me decanto por el original hasta que vea una en tal calibre .