«Lo buscaremos hasta que aparezca»
La guardería retoma hoy la búsqueda del oso de Santiago, atropellado en Somiedo la noche del sábado. «Nos saltó sobre el coche», dice el copilotoBELÉN G. HIDALGO
Santiago del hermo (Somiedo).
Lunes, 17 agosto 2020, 01:13
Un oso pardo adulto, de unos 150 kilos de peso, fue atropellado anteanoche en el kilómetro 28 de la carretera AS-227, en el tramo entre Aguasmestas y La Riera, cerca de la localidad de Santiago del Hermo, en el concejo de Somiedo. El animal invadió la vía justo en el momento en el que circulaba por la zona un vehículo conducido por un joven que no pudo evitar el accidente y que resultó ileso , igual que el otro ocupante. Eran las diez de la noche. «Veníamos de Pola de Somiedo y nos saltón encima del coche desde el otro lado de la carretera», explicó el copiloto, Luis Rodríguez, crítico con la falta de visibilidad en la vía por la abundante vegetación. «El oso se estuvo arrastrando por la carretera horas y horas», lamentó Rodríguez, que asegura que permaneció en el lugar del accidente hasta las dos de la madrugada.
El oso, en principio quedó tendido sobre la calzada, con heridas en una zarpa de la extremidad superior y una pata. El conductor dio aviso a los servicios de emergencia, que trasladaron la información a la Dirección de Medio Natural, que activó el operativo para el rescate. Agentes del Medio Natural y técnicos especializados en el manejo de plantígrados, con el apoyo de la Guardia Civil, se desplazaron al lugar del suceso. El oso de Santiago se había arrastrado fuera de la carretera a una zona de difícil acceso, muy pendiente y agreste, donde permaneció encamado.
En la valoración preliminar, los veterinarios indicaron que el animal podría padecer importantes lesiones internas, además de heridas de diversa índole. El objetivo era lograr acceder a las cercanías del lugar donde se encontraba el oso y administrarle un sedante para conocer sus constantes vitales y el estado del ejemplar malherido.
Complicado rescate de un oso herido en un atropello en Somiedo
MARCO MENÉNDEZ / BELÉN G. HIDALGO
La búsqueda se suspendió a las ocho de la tarde. Según ha podido saber EL COMERCIO, los agentes del Medio Natural llegaron a avistar al plantígrado hasta en dos ocasiones, pero se escapó de su alcance. A las 16.30 horas finalizó la el dispositivo con armas para poder sedar al oso.
Miel como cebo
Las dificultades de acceso y el movimiento del animal no facilitan su rescate. A última hora de la tarde, cerca de la zona donde se produjo el atropello, junto al río por donde se sospecha que cruzó y se adentró al monte, la guardería de Medio Natural colocó miel a modo de cebo en el interior de una especie de jaula. El objetivo pasa por atraer al plantígrado hacía dicho habítaculo, preparado para ser remolcado y proceder a su traslado.
«Pensábamos que lo habían sedado y se lo habían llevado», relató Marián Fernández, que pasó por el lugar del accidente pasada la medianoche y presenció el inicio del operativo. Cree que «el animal no pudo ir muy lejos. Es imposible. Apenas se movía», reiteró. Con ella viajaba Juan Luis Álvarez, que vio como la grúa cargaba el BMW oscuro siniestrado y cómo los agentes tomaban declaración a los implicados. «El oso no desaparece así como así, por arte de magia», indicó Álvarez, que no ocultó su temor por el peligro que supone un oso herido deambulando por el monte.
En este sentido, el Principado ha reiterado el consejo a todos los visitantes de espacios naturales que extremen las precauciones cuando circules por vías de comunicación de alta montaña y respeten la señalización referente al paso de fauna. Además, recomienda que, en caso de encontrar un animal herido, no se interactúe con él y se avise a las autoridades a través del 112.
Por su parte, el presidente del Fondo Asturiano para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas), Roberto Hartasánchez, afirmó que será prácticamente imposible evitar el atropello de un oso si éste sale de improviso a la calzada, especialmente de noche. «La mayor frecuencia se da en poblaciones oseras como la cantábrica, que viven en entornos en los con mucha población humana. Está ocurriendo en países como Croacia y Eslovenia, y en Asturias se va a seguir ese modelo», concluyó
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