Muere un zorro al que colocaron a «mala fe» un cencerro en el cuello
El animal fue visto con vida en Revilla de Santullán, en Palencia, por el Seprona cuando ya estaba «agonizando y malherido», pero al final murió y fue enterrado en la zona
Ana Gil Zaratiegui
ANA GIL ZARATIEGUI
Santander
Lunes, 8 agosto 2022, 18:11
«Malherido» y «agonizando, a punto de morir». Así describe el Seprona de Palencia el estado en el que este domingo encontraron a un zorro en el entorno de Revilla de Santullán (Palencia), a escasos 20 kilómetros de Cantabria, después de que un ciudadano se topara con el animal y diera aviso a la Guardia Civil. El animal, al que le faltaba una pata, yacía sobre las hojas del suelo de la montaña palentina con el cuello rodeado por una gruesa cadena de la que colgaba un cencerro que, según fuentes del Seprona, habría sido puesto por alguien «a mala fe».
Los agentes llegaron hasta la zona cuando el zorro todavía estaba vivo, pero su estado era tan crítico que al poco tiempo falleció. De hecho, el animal fue enterrado por el guarda de campo -encargado de vigilar y proteger la propiedad en las fincas rústicas- cerca del entorno en el que fue hallado.
El animal en el suelo, todavía vivo, cuando fue encontrado.
El animal en el suelo, todavía vivo, cuando fue encontrado. / DM
La voz de alarma la dio un amigo de Óliver del Nozal, biólogo, youtuber ambiental y guía de turismo en el Centro de Interpretación de la Minería de Barruelo, quien no pudo resistirse a denunciar la situación en sus redes sociales. Del Nozal explica que aunque el zorro es un animal omnívoro, gran parte de su dieta está compuesta por micromamíferos -ratoncillos, topos- aves e incluso anfibios y que su forma de cazar es similar a la de los gatos, con sigilo, al contrario de los lobos, que persiguen a sus presas: «Le han puesto un cencerro para ahuyentar a los animales y que le sea imposible alimentarse. Así hasta que muere por inanición. Es verdad que puede comer frutos como bayas o cerezas, pero es un complemento, un zorro no puede sobrevivir sin proteína animal», explica el experto, indignado, a este periódico al otro lado del teléfono.
Este biólogo y vecino de la zona recuerda que «cuando era pequeño» se dedicaba a desmontar lazos y trampas de gente que «mataba por matar» a los zorros de la zona: «No sé si ahora se sigue haciendo, pero antes era muy habitual, ponían un lazo de acero por donde sabían que iba a pasar y cuando el animal metía la cabeza, la trampa se cerraba y no volvía a abrirse, así que el animal se ahogaba», relata. Un vecino le ha dicho este mismo lunes que ya había visto a este zorro con el campano en el cuello «al menos hace mes y medio», por lo que creen que el animal habría estado deambulando y sobreviviendo hasta que «no ha podido más». Cuando fue encontrado, le faltaba una pata debido, «posiblemente, a que se cayó en un cepo», elucubra Del Nozal.
«Puede haber sido cualquiera, alguien que tiene gallinas y está cansado de que el zorro entre, un ganadero o, simplemente, una persona que disfruta haciendo el mal. No llego a entender la motivación para hacer esto, es un comportamiento psicopático. En vez de pegarle un tiro, hacen sufrir un largo tiempo al animal hasta la muerte», zanja contundente.
Según informan fuentes del Seprona de Palencia a este periódico, es la primera vez que tienen constancia de un episodio de este tipo en el área en cuestión. La Guardia Civil sigue investigando los hechos para tratar de identificar a la persona que colocó el campano al animal.
Muere un zorro al que colocaron a «mala fe» un cencerro en el cuello
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