Catalunya promueve la carne de caza para reducir daños en cultivos y accidentes de tráfico
Solo este año la Generalitat ha destinado cerca de un millón de euros para impulsar la comercialización y el consumo de carne de jabalí y otros animales salvajes que habitan en los bosques del territorio, y así reducir los daños en cultivos y los accidentes de tráfico causados por estas especies en Catalunya.
Es una de las medidas del plan del Departament d’Agricultura, Ramaderia, Pesca i Alimentació para revalorizar la carne de caza e incrementar la ingesta de un producto que rara vez forma parte de la dieta de la población, un paquete de acciones que ha sido presentado este jueves en la Escuela de Hostelería de Osona, en la localidad de Tona (Barcelona).
Mientras que el número de estos animales que pueblan los bosques catalanes aumenta año tras año —según datos de 2022, en la última década se han multiplicado por tres hasta alcanzar los 200.000 ejemplares—, el consumo de su carne continúa siendo muy bajo. Alrededor de 74.500 de jabalíes fueron capturados durante la última temporada, pero solo un 10 % se han destinado para alimentar a la comunidad.
Según datos de 2022
En la última década, la población de jabalís en Catalunya se ha multiplicado por tres hasta alcanzar los 200.000 ejemplares
Además de intentar cambiar estas cifras, el plan busca transformar la percepción social de la caza, por lo que Agricultura valora su papel en la gestión sostenible de especies, especialmente en un contexto en el que uno de cada tres accidentes en las carreteras de Catalunya son relacionados con jabalíes, corzos y ciervos, según datos de los Mossos d'Esquadra el año pasado.
Coches parados ante un grupo de jabalíes en Collserola.
Coches parados ante un grupo de jabalíes en Collserola. Lourdes Fernández
Para incentivar el consumo y la comercialización de carne de caza, la conselleria ha preparado, antes de que acabe el año, varias sesiones formativas en las escuelas hosteleras de Osona, Lleida y Figueres (Girona), además de jornadas gastronómicas centradas en el cocinado y apreciación de esta carne.
Por otro lado, parte de los 931.000 euros invertidos en este plan se destinarán a los cazadores y a los centros de recogida de caza que gestionan estos animales para facilitar el circuito de su comercialización y que puedan llegar a los establecimientos de manipulación, donde se acondiciona la carne para poderse vender en fresco o en forma de elaborados como los embutidos.
Asimismo, el Departamento de Agricultura trabaja en mejorar la red de centros de recogida y establecimientos de procesamiento de carne de caza para garantizar la seguridad e higiene de este producto, también en el ámbito del autoconsumo.
Beneficios de la carne de caza
Los expertos defienden que la carne de caza puede ser un producto muy interesante para añadir a la dieta. Su contenido en proteínas no es más elevado, pero presenta una mayor calidad biológica porque contiene los nueve aminoácidos que se consideran esenciales para el óptimo funcionamiento del organismo.
En general es rica en minerales como fósforo, hierro, zinc, selenio, magnesio y potasio, todos ellos importantes para diversas funciones del organismo.
La carne de estos animales salvajes suele ser más oscura y dura que la de los de cría, más a medida que crecen. En cambio, cuanto más jóvenes menos grasas aportan. También es cierto que el sabor es más intenso y hay que acostumbrarse a él.
Existe el peligro de que el animal contenga restos de plomo procedente de los proyectiles utilizados para abatirlos. Por ello, el Comité Científico de AESAN decidió en 2012, tras un estudio de la presencia de plomo en carne de caza, hacer públicas unas recomendaciones de consumo que fueron actualizadas en 2021; entre ellas, que los niños de hasta 7 años y mujeres embarazadas, planificando estarlo o en lactancia, eviten consumir estos productos.
Catalunya promueve la carne de caza para reducir daños en cultivos y accidentes de tráfico
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