Interesa saber...

Extraordinarias puntualizaciones, Alano; cabales, concretas y con fondo.

Más parece un pique sano entre profesionales que otra cosa. Por lo que decían estos grandes de la sierra, parece que:

- Los perreros extremeños presumían de su forma de batir -si me apuras ya se intuye el montear moderno- diferenciándola del resto.

- Los perreros manchegos lo hacían de sus rehalas, magníficas según relatan y muy por encima de la de otras zonas.

- Y los podenqueros andaluces parecen insinuar que si los otros no cazan con estos perros es sin duda porque no tienen capacidad suficiente para criarlos y por tanto les costará más adaptarse a los nuevos tiempos de reses.

En cuanto a lo del trabuco en El Molinillo no te extrañes, Jose, en efecto eran rehalas invitadas: andaluzas, manchegas y extremeñas, diez en total. Agustín lo relata en un episodio de sus memorias en el que habla, parcamente, de Las Formas de Cazar.

Sería interesante que habláseis sobre la cuna de la montería moderna y ya de paso, rogaría que se sigan aportando textos que hablen de las excelencias o no, que tenían las antiguas rehalas de estas tres zonas monteras.

Alano escribió:

De todos es sabido la dificultad que es encontrar a un perrero que diga que sus perros no son buenos, esto recubierto con la pátina que dan muchos años de monte (me refiero a los escritos que habeis puesto anteriormente) y que esta escrito por personas de cierto renombre, nos lleva a cometer el mismo error que cuando hablamos de tiempos en los que eramos chicos, tendemos a idolatrar a la persona,a la situacion concreta, a la epoca etc, etc.

Efectivamente.

Roque Barcia escribió:

En cuanto a lo del trabuco en El Molinillo no te extrañes, Jose, en efecto eran rehalas invitadas: andaluzas, manchegas y extremeñas, diez en total.

En Aliseda también se escucharon alguna vez; muy poco, pero alguna vez.
No se me olvida que un padre le dijo a su hijo:
- ¿Te has fijado que aquí no se usa el trabuco ni la caracola?
Que por cierto, lo de la caracola sí que me acuerdo que se empleaba durante el monteo mucho más en Córdoba y La Mancha.

Tengo un vago recuerdo de muy niño, probablemente fruto de mi imaginación, ya me diréis:
¿Puede ser que se pegara un trabucazo al soltar los perros y otro trabucazo final al llegar éstos a los camiones, para avisar del principio y fin del ojeo?

Roque Barcia escribió:

En Extremadura los perreros batíamos de forma diferente a como lo hacían en las provincias de Andalucia y Los Montes de Toledo. Cuando batiendo una mancha salían los perros detrás de las reses, los perreros extremeños nos parábamos hasta que oíamos tiros o hasta que creíamos que se había escapado sin tirar. Luego tocábamos el caracol y cuando reuníamos seis u ocho perros continuábamos batiendo. Los perros se repartían de nuevo por el monte en busca del rastro de otras reses. En Andalucía y en Los Montes de Toledo, cuando salían las reses, los perreros seguían andando sin perros o con los que eran malos a su lado, pero es muy probable que entre perrero y perrero se quedasen reses aplastadas. El perro que viene de correr una res no se entretiene en buscar el rastro de otra, sólo busca el rastro del perrero para unirse a él.

Lo que son las cosas, uno de los Organizadores más conocidos de Extremadura presume de prohibir a los perreros en sus monterías el uso de la caracola, de hecho no les permite ni llevarla.

Roque Barcia escribió:

Tengo un vago recuerdo de muy niño, probablemente fruto de mi imaginación, ya me diréis:
¿Puede ser que se pegara un trabucazo al soltar los perros y otro trabucazo final al llegar éstos a los camiones, para avisar del principio y fin del ojeo?

Yo lo que sí sé es que saltaba del catrecillo con el corazón en la boca. Nunca llegué a acostumbrarme a semejante zambombazo. Al principio, desde luego sí, pero tirar como señal de recogida, la verdad, no lo recuerdo.

Holland escribió:

Lo que son las cosas, uno de los Organizadores más conocidos de Extremadura presume de prohibir a los perreros en sus monterías el uso de la caracola, de hecho no les permite ni llevarla.

Porque en Extremadura no fueron cosa corriente. Se usaba un pito de hueso. Pero además es por su manera de entender la montería que, caracoleando durante el monteo, se despista a todo el mundo incluidos los perros.
Pero vamos, no tanto como prohibir llevarla. En una ocasión por las cuerdas de Malueñillos subía la rehala de Valdueza, se volcaron los perros a la Umbría, que no se podía cazar, y era de ver los caracolazos del perrero. Un rato bien largo duró aquello.

Beltenebros escribió:

Holland escribió:

Lo que son las cosas, uno de los Organizadores más conocidos de Extremadura presume de prohibir a los perreros en sus monterías el uso de la caracola, de hecho no les permite ni llevarla.

Porque en Extremadura no fueron cosa corriente. Se usaba un pito de hueso. Pero además es por su manera de entender la montería que, caracoleando durante el monteo, se despista a todo el mundo incluidos los perros.
Pero vamos, no tanto como prohibir llevarla. En una ocasión por las cuerdas de Malueñillos subía la rehala de Valdueza, se volcaron los perros a la Umbría, que no se podía cazar, y era de ver los caracolazos del perrero. Un rato bien largo duró aquello.

No si yo lo decía únicamente por esto:

Roque Barcia escribió:

En Extremadura los perreros batíamos de forma diferente a como lo hacían en las provincias de Andalucia y Los Montes de Toledo. Cuando batiendo una mancha salían los perros detrás de las reses, los perreros extremeños nos parábamos hasta que oíamos tiros o hasta que creíamos que se había escapado sin tirar. Luego tocábamos el caracol y cuando reuníamos seis u ocho perros continuábamos batiendo. Los perros se repartían de nuevo por el monte en busca del rastro de otras reses. En Andalucía y en Los Montes de Toledo, cuando salían las reses, los perreros seguían andando sin perros o con los que eran malos a su lado, pero es muy probable que entre perrero y perrero se quedasen reses aplastadas. El perro que viene de correr una res no se entretiene en buscar el rastro de otra, sólo busca el rastro del perrero para unirse a él.

Relativizar, contextualizar, parece más lógico y adecuado que sentenciar.
Eso creo.

Beltenebros escribió:

Roque Barcia escribió:

Tengo un vago recuerdo de muy niño, probablemente fruto de mi imaginación, ya me diréis:
¿Puede ser que se pegara un trabucazo al soltar los perros y otro trabucazo final al llegar éstos a los camiones, para avisar del principio y fin del ojeo?

Yo lo que sí sé es que saltaba del catrecillo con el corazón en la boca. Nunca llegué a acostumbrarme a semejante zambombazo. Al principio, desde luego sí, pero tirar como señal de recogida, la verdad, no lo recuerdo.

Puede ser, la verdad que la señal de inicio la tengo más nítida que la de recogida. Sonó en la primera montería a la que asistí en mi vida, con 5 ó 6 años, monteando el Saltillo de don Tomás, de invitación. No se si sería gancho o montería, estábamos en un cortadero, no se a qué altura pero parecía demasiada, sonó el petardazo y le pregunté a mi padre que si eso era un tiro y me dijo que no, que era un trabucazo para decir que empezaba el sarao. Quizá sonó también el de recogida o seguramente no, pero lo estuve esperando. Aquel día nos entraron unas ciervas, despacito cruzaron el cortadero. Me impactó ver a Manolo G. (él era un chaval) bajar el cortadero y recogernos en nuestro puesto, llevaba un palo sobre los hombros -apoyado en la nuca- y colgaba una cabeza de cochino de cada lado. Hembra y macho, para ser exactos.
Quizá haya oido otro trabucazo alguna otra vez, pero no lo recuerdo con la misma nitidez que aquel.

Holland escribió:

Beltenebros escribió:

Holland escribió:

Lo que son las cosas, uno de los Organizadores más conocidos de Extremadura presume de prohibir a los perreros en sus monterías el uso de la caracola, de hecho no les permite ni llevarla.

Porque en Extremadura no fueron cosa corriente. Se usaba un pito de hueso. Pero además es por su manera de entender la montería que, caracoleando durante el monteo, se despista a todo el mundo incluidos los perros.
Pero vamos, no tanto como prohibir llevarla. En una ocasión por las cuerdas de Malueñillos subía la rehala de Valdueza, se volcaron los perros a la Umbría, que no se podía cazar, y era de ver los caracolazos del perrero. Un rato bien largo duró aquello.

No si yo lo decía únicamente por esto:

Roque Barcia escribió:

En Extremadura los perreros batíamos de forma diferente a como lo hacían en las provincias de Andalucia y Los Montes de Toledo. Cuando batiendo una mancha salían los perros detrás de las reses, los perreros extremeños nos parábamos hasta que oíamos tiros o hasta que creíamos que se había escapado sin tirar. Luego tocábamos el caracol y cuando reuníamos seis u ocho perros continuábamos batiendo. Los perros se repartían de nuevo por el monte en busca del rastro de otras reses. En Andalucía y en Los Montes de Toledo, cuando salían las reses, los perreros seguían andando sin perros o con los que eran malos a su lado, pero es muy probable que entre perrero y perrero se quedasen reses aplastadas. El perro que viene de correr una res no se entretiene en buscar el rastro de otra, sólo busca el rastro del perrero para unirse a él.

Relativizar, contextualizar, parece más lógico y adecuado que sentenciar.
Eso creo.

Date cuenta, Javier, que la montería que cazaba Agustín no se corresponde ni en fecha, ni en forma, a la montería moderna. Ésta comenzó a gestarse justo después, al menos en Extremadura.

Lo de prohibir la caracola me parece una aberracion, a lo mejor les gusta mas el claxon de los coches o las trompetillas de guarda que es lo que se lleva ahora, volvemos a lo de siempre, la solucion facil, prohibir, en vez de enseñar al perrero, al montero y a todo el que no lo sepa que la caracola se puede tocar por varios motivos; a la suelta para orientar a los perros en la salida alocada de los camiones e indicarles la zona por donde empieza el ojeo, cuando los perros se salen de la mancha detras de una res, ahora suena raro, pero los perros con cojones lo hacian y lo hacen, y mientras no vuelvan no hay que avanzar, pues como se ha dicho antes, se dejan zonas sin cazar, cuando se vuelve la mano, bien por que se llega al tope o por cambiar radicalmente de direccion y como no, al recoger. La caracola no es ni buena ni mala, solo hay que saber usarla en su momento y saber entender su significado. Pocos sonidos hay tan puros y monteros como una caracola y una veintena de cencerrillas entre el monte.

Pa mi gusto sobran cencerrillas.

Alano escribió:

Lo de prohibir la caracola me parece una aberracion, .....

Y a mi, pero ya sabes como funciona esto, el que paga manda.

Roque Barcia escribió:

Pa mi gusto sobran cencerrillas.

En absoluto.
Cuestión de pareces.

Me parece demasiada escandalera innecesaria.

A mi una alegre esperanza.

No te niego que, ese cascabelillo solitario que aparece a última hora e inesperadamente levanta un bicho al lado del puesto, me hace vibrar. Pero cuando son varios los que se juntan y tienes los bichos cerca, no me gusta, creo que distrae y en cierto modo desconcentra. Ponerle una cencerrilla a un perro negro lo entiendo, igual que se la pondría a un pastor alemán cazando en Zamora, pero de ahí a que la mancha suene a cencerro como que no, a los que cazamos de oido creo que no nos viene nada bien.

Roque Barcia escribió:

No te niego que, ese cascabelillo solitario que aparece a última hora e inesperadamente levanta un bicho al lado del puesto, me hace vibrar. Pero cuando son varios los que se juntan y tienes los bichos cerca, no me gusta, creo que distrae y en cierto modo desconcentra. Ponerle una cencerrilla a un perro negro lo entiendo, igual que se la pondría a un pastor alemán cazando en Zamora, pero de ahí a que la mancha suene a cencerro como que no, a los que cazamos de oido creo que no nos viene nada bien.

La verdad Ricardo a mi me gusta y mucho ponerles a mis perretes esas esquilas, hay gente que dicen o comentan que se quedan sordos al llevarlas yo no me lo creo hace muchos años que las llevan puestas y yo no le he notado nunca nada.

JVPESTOREJO escribió:

, hay gente que dicen o comentan que se quedan sordos al llevarlas .

La gente dice muchas cosas...

Roque Barcia escribió:

. Pero cuando son varios los que se juntan y tienes los bichos cerca, no me gusta, creo que distrae y en cierto modo desconcentra. .

Música celestial, oiga.

A mi el ruido que me distrae y desconcierta es este:

Pues encuentro sentido si la llevan los punteros, o si la llevan perros que laten poco y/o perros negros u oscuros que puedan confundir a las escopetas, pero a los cencerros de los demás no les encuentro más sentido que el estético. Para el que le guste, claro.

Yo suelo poner las cencerrillas a los perros que tengo mas oscuros y a los que tardan en venir y si acaso algun cachorro nuevo pero los demas van sin las cencerrillas.

Como simple información decir que tanto lo de las cencerras como lo de los collares de colores fue, según parece, una idea de Rafael Guerra, lo segundo para saber a quién pertenecían los perros y lo primero como medida de seguridad, a pesar del predominio de las capas blancas (los habría burros de güevos).

El poeta de la Sierra escribió:

A mi una alegre esperanza.

JVPESTOREJO escribió:

La verdad Ricardo a mi me gusta y mucho ponerles a mis perretes esas esquilas, hay gente que dicen o comentan que se quedan sordos al llevarlas yo no me lo creo hace muchos años que las llevan puestas y yo no le he notado nunca nada.

Pues entonces todos los perros becaderos estarían sordos, y en cambio la sorda....es la becada.

Saludos.

Personalmente lo veo como una medida de seguridad, la campanilla digo, yo solo se la pongo a los perros oscuros, por miedos, son ya varios los que me han cepillado de tiro y los que no se sabe.... personalmente no me gustan, sera por que en mi casa siempre hemos sigo ganaderos y lo asocio a cabras y ovejas.