La generación que construyo España.

Copio y pego este Mail que me ha llegado y me ha parecido interesante, y que entenderán muy bien los nacidos entre 1.965/1.975.






 

“¿Quiénes son los pobres? Los nietos de los ricos”. Aforismo castellano

Cuando analizas lo que ocurre en una empresa o una sociedad, debes buscar las causas que provocan su situación, porque sólo trabajando sobre las causas, puedes cambiar los efectos. Y no tengo ninguna duda de que una de las principales causas de la prosperidad que vivimos en los años pasados fue la actitud de la generación de nuestros padres, y una de las principales causas de la crisis, es haber perdido esa actitud.

Recuerdo que hace años, un empresario brillante que viajó a China para hacer negocios, me comentaba: “China va a ser imparable. Cuando llegas allí el ambiente te recuerda la España de los años 70. Todo el mundo quiere trabajar mucho, ahorrar, comprarse su casa, su coche, que sus hijos vayan a la universidad… Cuando una generación está así centrada, no hay quien la pare” Este pensamiento me hizo reflexionar entonces y me ha vuelto a la memoria al contemplar a las tres generaciones que convivimos.

Mis padres tienen en torno a 70 años, y siempre han sido un ejemplo de trabajo, honradez, austeridad, previsión y generosidad. Pertenecen a una generación que, como dice mi padre, les tocó el peor cambio: de jóvenes trabajaron para sus padres y de casados para sus hijos.

Son gente que veían el trabajo como una oportunidad de progresar, como algo que les abría a un futuro mejor, y se entregaron a ello en condiciones muy difíciles. Son una generación que compraba las cosas cuando podía y del nivel que se podía permitir, que no pedía prestado más que por estricta necesidad, que pagaban sus facturas con celo, y ahorraban un poco “por si pasaba algo”, que gastaban en ropa y lujos lo que la prudencia les dictaba y se bañaban en ríos cercanos, disfrutando de tortillas de patata y embutidos, en domingos veraniegos de familia y amigos.

Y tan sensatos, prudentes y trabajadores fueron, que constituyeron casi todas las empresas que hoy conocemos, y que dan trabajo a la mayoría de los españoles.

Sabían que el esfuerzo tenía recompensa y la honradez formaba parte del patrimonio de cada familia. Se podía ser pobre, pero nunca dejar de ser honrado.

La democracia significaba libertad y posibilidades y seguir viviendo en armonía y respeto.

Y cometieron los dos peores errores imputables a esa generación: 
 
1)      “Que mis hijos no trabajen tanto como trabajé yo”. Nos cargamos la cultura del esfuerzo y del mérito de un plumazo, convirtiendo el trabajo en algo a evitar.

2)      “Como tenemos unos ahorrillos, hijo, tu gasta, que para eso están tus padres”. Con lo que mi generación empezó a pensar que el dinero nacía en las cuentas corrientes de sus padres, que daban la impresión de ser inagotables y que los bancos eran unas fuentes inagotables de hipotecas, rehipotecas y contrarehipotecas.

Y entonces, eclosionó nuestra generación (yo soy del 67). La generación de los nuevos ricos, la generación de “los pelotazos”, del gasto continuo, de la especulación, de la ingeniería financiera, de la exhibición del derroche, la de lo quiero todo y lo quiero ya, la de “papá dame”.

Y todos nos volvimos ricos (en apariencia), todos nos convertimos en gastro-horteras. ¿Conocéis a alguien que se atreva a comer un bocata de chorizo? Le corren a gorrazos por paleto. Ahora hay que comer hamburguesas deconstruidas al aroma de los almendros al atardecer. ¿Y qué decir del vino? Pasamos del Don Simón con Casera, al Vega Sicilia
sin fase de descompresión. El vino ya no está “bueno”, ahora tiene matices a fruta del bosque, con un retrogusto alcohólico, que adolece de un cierto punto astringente, con demasiada presencia de roble.
Esto, por supuesto, a golpe de docenas de euro, que para ser un “enterao” hay que pasar por taquilla. ¡Y es que pocas cosas cuestan tanto, como ocultar la ignorancia!

Somos la generación de “endeudarse para demostrar que eres rico”.
Increíble pero cierto.

- ¿Sólo debes 500.000 €? Es que eres un cutre. Mira, nosotros debemos ya 2.000.000 y nos están estudiando una operación por otros 2 más.

- Vosotros sí que sabéis sacar provecho al sistema… Ojalá yo algún día pueda deber esas cantidades. ¡Cuánto envidio tus préstamos!

En Alemania no daban abasto a fabricar Mercedes, Audis, BMW para los españoles.

Irrumpió Europa en nuestras vidas y llegó en forma de mega infraestructuras que producían mega comisiones para todos los involucrados. ¡Viva el cazo! ¡Viva el yerno del Rey! ¡Que se besen los padrinos! Además llovían las subvenciones, nos daban una fortuna por plantar viñas y luego a los dos años otra fortuna por arrancarlas. Que llegaba un momento que no sabías si tenías que plantar o arrancar. A propósito, ¿Qué toca este año?

Si algún “tarao” dice que hay que parar esto, se le lapida y  “que no pare la fiesta”. Por supuesto que todos estamos de acuerdo que esto es imposible que se sostenga, pero hay que empezar a recortar por el vecino, que lo mío son todo derechos esculpidos en piedra en la sacrosanta constitución.

De la siguiente generación mejor no hablar (lo dejaré para otro post).
Esa es la generación que dice el aforismo que será pobre, por ser nieta de ricos.

Si somos incapaces de volver a los valores con los que se construye una sociedad sostenible, nos hundiremos, eso sí, cargados de reivindicaciones.

En mi casa siempre he tenido un ejemplo vivo de cordura, honradez y esfuerzo. Y no han sido menos felices que nosotros. Los psiquiatras, de hecho, dicen que al revés, que han sido bastante más. Debe ser que la sencilla tortilla, el melón fresquito, comprar el sofá cuando se podía, poner las cortinas cosidas por nuestra madre, con ayuda de la abuela, trabajar y echarle huevos para emprender (aunque no lo llamaban así) no debía ser mala receta.

Desde aquí quiero dar las gracias a mis padres y a toda esa generación que nos regalaron un país cojonudo, que nos hemos encargado de arruinar (entre todos, que todos hemos aplaudido la locura), y que sólo con que nos descuidemos un poquito más, le vamos a dejar a nuestros hijos un protectorado chino, donde serán unos esclavos endeudados y tendrán unas historias legendarias sobre la prosperidad que crearon sus abuelos, empeñaron sus padres y son incapaces de imaginar los nietos.

Estamos a tiempo de cambiarlo, pero cada vez tenemos menos. Podemos encontrar maestros en casa. 
 
 

Muchas gracias por compartir ésto. Gracias a Dios yo también tuve en casa un ejemplo de cordura, honradez y esfuerzo, mi Padre, que me enseñó a valorar a la gente no por lo que "tiene" sino por lo que de verdad "vale" y con muchos bocatas de chorizo entre lección y lección. A ver si soy capaz de transmitir lo mismo a los que vienen por detrás. Un saludo y

Muy bueno. Y, efectivamente, está en nuestras manos (todavía).

GRACIAS

Tengo una tentación de escribir abrumadora, pero me aguantaré porque empezaría a contar cómo era mi padre (uno de esos empresarios de los que se habla) y no sabría parar.

Muy bueno, de verdad. Gracias

muy bueno!

Me ha tocado la generación pobre creo... jaja

Gran artículo que hace recapacitar

Buenísimo. Gracias por colgarlo aquí.

Muy bueno.

Muy bueno, gracias por compartirlo aqui.

No se puede decir mas verdades en menos espacio, en lo que no estoy de acuerdo, es que estemos a tiempo de arreglarlo, por medios pacíficos, ¿quien va a quitar a la casta política sus privilegios'?, envueltos en su mediocridad, se tapan unos a otros.
Los sufridos ciudadanos vamos a tener que darles un pequeño o gran empujón seguro.

"EL HOMBRE ES UN LOBO PARA EL HOMBRE". T.H.

yo soy como dice usted de los que seremos pobres, pero igual con pobres se queda usted corto en el comentario yo naci en el 86 y gracias a mis padres he estudiado y gracias a eso tengo ahora mi trabajo, pero de mi generación para aca estamos muy mal acostumbraos estamos acostumbrados al ( dame ,jame ,trame) nuestro padres veian que se podia ganar una perra y se tiraban a por ella aunque hubiese que eslomarse, vete ahora le dices a un pimpollo de estos eso veras donde te manda, gran articulo.

Si me da usted su permiso lo enlazare para que lo pueda leer la gente que tengo en twiter por que me parece una gran verdad.

Pues yo creo que la culpa no es sólo de los españoles de a pie, sino de los que los gobiernan. Lo de pan y circo, (vease consumo y diversión) es una fórmula vieja que ya se usaba en la antigua Roma para tener contenta y mansa a la plebe (vease votantes) mientras la minoría en el poder se enriquecía. Que nadie se engañe, un desbarajuste de las dimensiones del que se ha organizado sólo ha sido posible porque unos pocos se han enriquecido a costa de la masa consumista que se endeudaba, y no me refiero sólo a banqueros. El que quiera entender que entienda.... Por cierto sobre el 2009 oí a un importante político decir que para salir de la crisis había que consumir más. Ahí me di cuenta de que estabamos perdidos y ojo que aún esto no ha tocado fondo.

Hacía mucho tiempo que no leía algo tan bueno. Cuantas verdades en tan poco espacio.

Y para que contarles lo que fueron los miles de Españoles e Italianos ( Así, con mayúsculas) que llegaron a Argentina sin nada mas que su valija de cartón, su honradez, su cultura del trabajo.... Ellos hicieron este país grande, y sus hijos y nietos, tal como dice el mail de Percutor, se encargaron de destruir y olvidar su ejemplo. Yo que desciendo de Gallegos e Italianos me enorgullezco de esa herencia hoy olvidada por casi todos......y así nos va.
Escuchen esta canción del gran Alberto Cortez y verán de que hablo.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Y esto no es nada para lo que viene, pues casi todos los buenos se han ido a trabajar fuera de España.

No quiero hablar, me cabreo mucho.

Percutor,su detalle de darnos las gracias a los setentones,es de agradecer,y así lo hago.
Podría contar y añadir a ese escrito un montón de cosas,pero ¿ para qué ? ; parece que estamos todos de acuerdo con el texto,que es fiel reflejo de lo que pasó,de lo que está pasando,y ¡ ojalá que no siga pasando !,porque aunque estamos a tiempo,como Vd. bien dice, ¿ lo cortaremos...?.
Hemos estirado más el brazo que la manga,y así nos luce el pelo...
Suscribo todo lo que en ese escrito se dice,y como en otro escrito de esta misma sección se opina :
No quito ni una coma.

Husmeando en el foro he tropezado con este hilo tan acertado. Tal reflexión, que suscribo en su integridad es fiel reflejo de lo que nos está pasando. No se premia el esfuerzo, y se iguala a todos por abajo. ¡Así nos va! Parece que trabajar y ahorrar está mal visto, y lo de vivir por encima de nuestras posibilidades, parece una obligación que si no la haces, te tachan inmediatamente de tonto, cuando no de rarito.

La "Barra Libre" que hemos tenido es muy divertida, como toda barra libre, pero: ¿no saben que se agota y ya no hay más?

Muy bueno.
Pequeños comentarios al respecto:
-Un cuñado que por cierto ha trabajado mucho me dice, ser rico cuesta mucho y parecerlo mas.
-No soy de los que echan pestes a los que trabajan mucho, todo lo contrario soy mal visto por llevar a mi familia apretada...todo lo poco que tenemos ha costado mucho...pero estoy contento porque más o menos entienden que no nos han regalado nada.
-Una hija estuvo en Alemania una temporada, aprovechamos unos días para que la vuelta la hiciéramos juntos y de paso conocer un poco aquello, nada tres o cuatro días. La anécdota fue que tuvimos que coger un taxi para regresar al hotel, -en el tiempo que estuvimos por allí no se veían muchos Mercedes, y marcas como las citadas en el post- y pregunté al taxista que por las calles no se veían los citados automóviles, la contesta fue una sonrisa...
-Personalmente creo que la situación no tiene arreglo porque toda la vida ha pasado lo mismo y por desgracia sin pobres no hay ricos.
Saludos.