Batidas y Resaques Aragoneses 2012/2013

Aunque no este bien el decirlo, me alegro del fallo porque de esa manera mi fallo en Romanones se minimiza bastante ... ya en serio, afortunado de ver caza y CAZAR.

buena jornada si señor

No te preocupes Ciro, para la próxima cáe.

Se ve que tiene buenas navajas. Siento lo de los perros eso solo les pasa a los valientes, que se recuperen bien los otros.

Por cierto el tiro lo tiene nunca mejor dicho "entoa la frente."

Buena mañana echasteis, eso es quemar polvora si señor

Todos no se pueden matar Ciro, y mas a esas distancias y en esas
condiciones de viento.
Que no tarde en llegar la proxima oportunidad.
Un saludo boticario

Enhorabuena a tu cuadrilla por esos lances y su resultado, para tí la próxima será mejor.
Siento lo de esos valientes, los que quedan que se recuperen pronto.

Vaya pedazo de guarraco!

Lo del cochino, se te puede perdonar. Pero lo de las fotos.....MIRA QUE ERES MALOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Vaya navajas que gastaba el amigo, por lo menos conseguisteis haceros con el, da mas rabia cuando te rajan los perros y se van.

javigb escribió:

Lo del cochino, se te puede perdonar. Pero lo de las fotos.....MIRA QUE ERES MALOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Acabo de recoger la cámara hoy mismo, llevaba hasta povo namibio en su corazón. Las fotos son del móvil y por la noche, que terminamos limpiando los bichos pasadas las siete. De donde no hay no se puede sacar, y hablo del móvil, que te conozco. pecador.

A ver esas crónicas Que sé que las hay....

Bueno, ahí va. Después de un tiempo si mucho que destacar en las salidas de los fines de semana anteriores aparte de que en la cuadrilla nos hemos hecho expertos en cambiar a los cochinos de mancha pues todos los días los hemos sacado pero pocos hemos tocado pelo, estos dos últimos fines de semana me he divertido.
El pasado fin de semana, dimos una mancha en la que algunos días antes le habíamos cobrado tres cochinos. Dos bonitos navajeros y una cochina enorme. Me coloqué en la misma postura que aquel día y a esperar. En la primera mano poco que destacar salvo un conejo que lo tuve más de media hora correteando a escasos veinte metros de mi hasta que se hartó y se fue. Pasaron los perros y nos dimos la vuelta. Pronto dan con los cochinos con la pena que estábamos cargando aire y se escurrieron lejos de nuestras posturas. Ya casi no oía a los perros cuando por el rabillo del ojo y entrando por mi espalda veo moverse algo. El conejo pienso. Pero no, es un jabalí pequeño (probablemente huérfano de la cochina grande de hacía unos días). Me echo el rifle a la cara y lo meto en el visor con esa sensación de lo veo, no lo veo, lo veo, no lo veo. Entre los bojes altos y lo rápido que va es imposible centrarlo. Le mando un pildorazo entre dos matas y agua y un poco más adelante, antes de coronar la umbría le mando el segundo y a criar. Aviso por la emisora de que entra en el resaque, pero no tenemos perros así que a esperar. A los pocos minutos llega el resacador que no ha dado con él y vamos a ver por donde ha traspuesto y cuál es la sorpresa de que en el segundo tiro hay sangre. Es fácil de seguirla por la nieve y vamos subiendo hasta coronar la ladera, con la mala suerte de que en la solana la nieve ha desaparecido. Cada vez es más difícil seguir la sangre y la vegetación hace imposible el poder ver el rastro. Estuvimos casi una hora intentando dar con él, pero fue imposible.
Hoy dábamos una solana que presuponíamos que debían estar allí. Los puestos cerca del río (una pena no poder oír nada más que el ruido de la mucha agua que lleva), en la umbría.
Me coloco en el último puesto del río. A mi izquierda, a media solana hace de cierre de martillo otro compañero. Hoy y después de varios fines de semana convenciendo a mi chaval de que no subiera por el frío que ha hecho estos días, me acompaña al puesto. Hace frío pero él no tiene, me dice.
Saco el doble, le monto el visor, mete las dos balas el chaval (esto dará suerte pienso), cierro el rifle y a esperar.
No hacen nada más que soltar los perros y dan con los cochinos. El del puesto primero avisa de que van para abajo siete cochinos, que nos preparemos en el barranco. El resacador de abajo da con otro jabalí que se lleva los perros tras él. Atento a la vista pues oír es imposible, me sorprende el de mi izquierda con dos disparos de escopeta y después con otro el del puesto anterior a él. Ya consigo oír a los perros y el compañero de la izquierda (el de media solana) les manda cuatro salvas. Corremos por el camino que cubro hasta colocarnos en el barranco a su altura por si se descuelga alguno. No es así y tranquilidad otra vez. Nos volvemos al puesto.
Por la emisora informa que le han entrado los siete. Tres se han salido del resaque, tres se han vuelto y uno tiene allí y que estemos atentos.
De repente me llama por la emisora y dice que el que tenía allí, no está. Ha salido como un rayo hacia el barranco. Aviso a mi chaval y corremos otra vez por el camino hasta donde se ve la salida del barranco. Vamos ya despacio, sin hacer ruido y mi chaval detrás, pegado a mí. No se ve nada hasta que detrás de nosotros, en el barranco oigo ruido. Aparto a cámara lenta al chico, lo coloco a mi altura y le señalo a donde he oído el ruido pidiéndole silencio cruzando el dedo sobre mi boca. Los segundos se hacen horas pues no sé como es el jabalí y lo herido que está. Veo moverse los boj y asoma en la orilla del camino, a escasos diez metros de nosotros, un cochino negro que al vernos se queda petrificado. Noto que me tiran del pantalón y antes de que de el tornillazo disparo cayendo fulminado al fondo de barranco. Miro al chaval y los ojos se le salen de las orbitas. Vamos a donde ha salido y está dando los últimos estertores en el fondo del barranco. Miro de nuevo a mi crío y me dice: “¿lo has visto? Ha asomado la cabeza y ya se iba” Nos fundimos en un abrazo y me susurra: “ya te lo he dicho esta mañana que hoy cazábamos uno”. Creo que sólo superará la ilusión de ayer el día que sea él quien apriete el gatillo.
El resto del resaque transcurrió con algún disparo más al resto de cochinos que se volvieron hacia la suelta, quedándose con una cochina maja.
Una vez acabado el resaque lo sacamos del barranco hasta el camino y nos hicimos las fotos de rigor. Resultó ser un machete de unos treintaicinco kilos con un primer tiro de un rasponazo en el pecho que no echaba ni sangre pero que lo había dejado aturdido hasta que se recuperó.
Estoy seguro que no lo olvidaremos nunca ni mi chico no yo. Y lo recordaremos cada vez que veamos la tablilla que colgará en su habitación.

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Enhorabuena Javi, ahora a esperar a que el sniper jaecetano nos quiera contar lo bien que se le dió ayer, también iba acompañado de uno de sus churumbeles ...

Enhorabuena, Javi. Esas sensaciones deben ser más grandes que las de abatir el macareno de tu vida.

Tienes toda la razón, Luis. El sábado estuve con él echando un café, y ayer me mandó alguna foto sobre lo acontecido el domingo. A ver si tiene ganas y nos lo cuenta. (Venga Jose, no seas malo )

bien javi biennnn por el xabalin y por la experiencia del chaval

Enrorabuena Javi!!!!!!!

Enhorabuena Javi, me alegro mucho por los dos.
.

Enhorabuena Javier, ya te veo flotando por los techos de la Universidad. Ese día lo recordarás siempre

Enhorabuena Javi, esos momentos son para el recuerdo.

Gracias a todos. Es una sensación indescriptible.
Había ido a la codorniz bastantes veces con él, pero esto es totalmente distinto.

Aunque te hartes de cazarlos, ese maranchon, va a ser el cochino que jamás olvidarás y lo recordareis por el resto de los días. Enhorabuena cazadores.
Un abrazo

Bueno pues como se suele decir "después de la tormenta llega la calma", y así a sido, la suerte me ha vuelto a sonreír.

Sábado 9/02/2013
Me pego toda la mañana en casa con los enanos, la parienta trabaja y en la calle hay un tasco de nieve importante como para andar "paseando". Pasadas las 2 de la tarde llega mi señora de currar y nada mas verme el careto me manda al monte (es una santa). A las 3 estoy con los compañeros que están terminando de comer. Me echo un cafe con ellos y preparamos el tajo. Hay bastante nieve y los coches sirven de poco así que toca pinrelar. Como acabo de llegar y estoy fresco me mandan a cerrar un cortafuegos en la otra punta del resaque. Me pongo las polainas y agarro pista adelante. Tengo unos 35 minutos hasta el puesto y mas de 30 cm. de nieve en la pista. En algún ventisquero me llega hasta rodilla. Pero bueno a esto hemos venido...........
Por fin llego al puesto y aviso por la emisora de que pueden soltar cuando quieran.
Esta nevusqueando y pese a que todo el paisaje esta blanco no hay demasiada luz. Como a los 20 minutos de estar puesto veo moverse algo entre los pinos. A simple vista no distingo que es, está a unos 100 m. y medio tapado por los pinos. Subo los aumentos del visor y a través de el lo veo. Es un cochino que anda trasteando en la linde de los pinos, va movido y esta ajeno a la cacería. Clavo rodilla a tierra y espero haber que hace. En un momento dado el cochino se queda clavado levanta la cabeza y se mete hacia adentro. Entre medio de los pinos le mando un tiro y desaparece. Que mala suerte tengo este año (pienso) por H o por B siempre me pasa algo. Aviso por la emisora de lo ocurrido y les aviso de que el cochino no a salido del resaque, es mas va en dirección a las esperas de la parte baja. Como a los 15 minutos se oyen dos disparos. Por la emisora informando de que han tirado a un cochino grande y que va herido. Uno de los resacadores da con el rastro de sangre y llega a mi puesto contrariado. Pero si lo han matado abajo como viene la sangre para arriba me dice. No lo se, le digo, yo lo he tirado muy mal y no se si lo he tocado. Claro que lo has tocado coño, si no de que llego yo hasta aquí por la sangre .
Entre tanto, otra espera a oído pasar al cochino y tras llegar hasta el consigue rematarlo. Finalmente llevaba 3 tiros. Uno bajero y trasero, en la tripa (el mio), otro entre los jamones, en la zona del pito y otro en la frente. Ese no hace falta preguntar de quien . Llevaba bastante prisa y ademas no soy yo de discutir bichos con un tiro de esos (vamos de ninguno) así que se lo quedo el compañero que lo tiro en segundo lugar. Lástima porque era un cochino majo, pero así el próximo día andaré mas fino .

El puesto (donde se estrecha el cortafuegos asomo. Lado izquierdo)
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De regreso al coche
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El animalico en cuestión
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Un saludo

Vamos, dale a las teclas Jose que tienes más que contar ...

Domingo 17

Me fío de la previsión meteorológica y me llevo al crío. Lleva varias semanas sin poder venir debido al mal tiempo y a la cantidad de nieve que hay en el monte.
Después de varias peripecias con los coches llegamos (+/-) donde preveiamos deja los coches y tras unos 20 minutos llegamos al puesto. Hace unos meses, en ese mismo puesto, tuvimos la suerte de abatir una cochina en un lance muy bonito. No son las once de la mañana y hace un día espectacular; sol y nada de viento. Que buen día hace Papa, me dice el enano.
Los puestos altos tardan mas de la cuenta en subir, se nota que no hemos subido "los de siempre" y hasta cerca de las doce no se sueltan los perros.
Al poco de soltar una ladra fuerte rompe el silencio de la mañana, los resacadores se desgañitan a vocear pero el cochino se vuelve, quiere irse por la parte baja y en esa zona no hay casi esperas. El resacador pegando voces, un tiro al aire y aun así el cochino se le presenta de frente. Con el otro tiro que lleva en la superpuesta lo hace tambalearse pero sigue de frente y se tiene que apartar para no ser arrollado. No tardan los perros en agarrarlo y el resacador en rematarselo. Es un navajerete de unos 60 kg. A vendido cara su vida, un par de perros han sido punteados. Nada grave pero hay que coserlos.
Pasa la mañana y la mancha da signos de "no estar buena", apenas ven rastros de ellos. Cerca de la una y media dan con un nuevo encame. Viene en nuestra dirección, pero me extraña que suba, en la umbría hay mucha nieve y salvo que vayan muy apretados no van a venir hacia aquí. Así es, el cochino se vuelve sobre sus pasos con tan mala suerte (para el) que se da de bruces con 3 o 4 podencos, entre ellos la Nala, un cruce de podenco con dogo que es una maquina agarrando cochinos. Entre tres podencas y un par de sabuesos de los que venían tras el lo atrapan. Aunque están a bastante distancia, desde el puesto oímos el agarre y al cochino. El crío me suelta "vaya ya lo han atrapado, ya no le alegra la mañana a nadie" .
Y eso dio de si la mañana. Dos cochinos y ninguno de los dos asomo a las esperas .

Vistas desde el puesto (con el majo vestido incluido )
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Antes de irmos y con el arma descargada le deje mirar por el visor
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Con el navajerete
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Bueno pues eso dio de si "la mañana". A la tarde es cuando entramos en acción