Que cab.oncete el gordo...
Hace muchos años (contaba yo con 13-14 años) iba en el bus por la tarde e iba a tope, todos los asientos ocupados. Íbamos los de siempre, trabajadores hartos de currar todo el día y algunos estudiantes que estabamos en planta desde las 6 de la mañana y que veníamos de aguantar las clases, la gimnasia... etc. Gente muy cansada ya a esas horas.
Entran en el bus un par de señoras muy encopetadas, relajadas, arregladas y bienvestidas con ganas de animada charla, con bolsas de El Corte Inglés, boutiques...etc en las manos.
Como nadie se levantó para cederles el asiento, una de ellas le dice a la otra con retintin y para que todos nos enteraramos:
- Desde luego, que en este país ya no hay vergüenza, antes cualquier hombre se levantaba y le cedía el asiento a las señoras.
Nadie dijo nada, aunque recibieron miradas de : "señoritingas pijas recien levantadas de la siesta que vienen de compras y de merendar... ya podrían haber cojido un taxi".
La señora, ante que nadie dijo nada y nadie se levantó, volvió a repetir la misma frase, pero en tono mucho mas alto y con mas exigencia en su petición de asiento, y recalcando mucho la falta de vergüenza actual.
Un albañil ya mayor que estaba espatarrado en un asiento con aspecto de estar reventado de currar, le soltó a la señora con voz estentórea y con mucha cachaza:
- Zeñoraaaaaa, que vergüenza zi hay... ¡¡¡ lo que no hay zon aziento c.ño !!!.
El bus se despertó de las carcajadas. Las señoras encopetadas se bajaron en la siguiente parada.
Saludos... Enjarao.
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Mientras mas practiques... mas suerte tendrás (Fred Bear).