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Una vaca de 2 años de la ganadería El Recuestu, de Intriago (Cangas de Onís), resultó muerta tras sufrir un ataque de lobo a las ocho de la mañana de ayer, junto a la carretera a los Lagos, en una zona conocida como El Humedal, cerca de La Güesera.


Los hechos fueron presenciados en directo por un pastor que se dirigía a atender su ganado cuando vio a escasos metros de la carretera cómo el cánido se abalanzaba y mordía a la vaca. A pesar de que consiguió ahuyentar al depredador, no pudo hacer nada por el animal atacado, pero alertó a sus dueños, a los cuales conocía, de lo que acababa de presenciar. «Subimos corriendo y nos encontramos a la vaca todavía caliente y destrozada», cuenta la ganadera Natalia Valle, acerca del que ha sido el primer suceso de este tipo que sufre una de sus cuarenta vacas que pastan en El Humedal.


La propia Valle asegura que jamás pensó que sus animales serían atacados debido a la buena ubicación de sus pastos. «Es muy raro que ataquen junto a la carretera y más a una vaca ya grande como era ésta», declara la mujer, que, aun así, sostiene que los ataques a cabras y ovejas en zonas más apartadas se producen prácticamente a diario.


En lo que respecta a la descripción del lobo, se trataría de un cánido de gran tamaño que, si bien fue visto solo durante el ataque, las investigaciones de los miembros de la guardería del parque nacional de los Picos de Europa apuntarían a que iba acompañado por crías al encontrar huellas de pequeñas dimensiones junto a otras más grandes.