La Guardia Civil sorprende cazando a dos hombres en estado de embriaguez
La Guardia Civil denunció a dos hombres a los que los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) sorprendieron, en días distintos, cazando con «evidentes signos de embriaguez» en Chimeneas. Además, también les requisó las armas que portaban.
22/07/2014 | Granada Hoy
El primero de los denunciados salió a cazar el pasado día 13, primer día de caza de la temporada 2014/15. Entonces, la patrulla del Seprona de la Guardia Civil ubicada en Láchar lo observó durante el ejercicio de la actividad con problemas de equilibrio al andar, por lo que procedieron a su identificación, comprobando que también tenía dificultades al hablar a consecuencia posiblemente de la ingesta de alcohol.
Requerida la presencia de una patrulla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, se le realizó una primer prueba de alcoholemia que dio positivo con una tasa de 0,69 mg/l de alcohol, y una segunda cuyo resultado fue de 0,68 por lo que, atendiendo a razones de seguridad, se le intervino el arma y se le notificó que era denunciado.
Esa misma patrulla del Seprona fue alertada de la presencia de un vehículo circulando por caminos del mismo término municipal, desde el que se realizaban disparos contra piezas de caza, según informó el Instituto Armado en una nota. Los hechos se produjeron en la tarde del día 17, segundo día de caza.
Establecido el dispositivo, se procedió a interceptar un vehículo tipo 4x4 circulando por un camino y ocupado por dos personas, ambas con evidentes síntomas de embriaguez y llevando el acompañante una escopeta en las manos.
Requerida de nuevo la presencia de una patrulla de la Agrupación de Tráfico, se procedió igualmente a realizarles pruebas de alcoholemia, dando resultado positivo en las dos personas, el conductor con una tasa de 0,68 y 0,60, y el acompañante y portador de la escopeta 0,81 y 0,67.
Finalmente, se instruyeron diligencias contra el conductor del vehículo por supuesto delito contra la seguridad vial. Además, fue denunciado por posible infracción a la Ley 8/2003 de la Flora y la Fauna Silvestres al cazar desde un vehículo a motor. A su acompañante y portador del arma se le denunció por el mismo concepto y al Reglamento de Armas por el uso de armas en estado de embriaguez, interviniéndose la escopeta que manejaba.
La Guardia Civil recordó que llevar o utilizar armas en estado de embriaguez supone una infracción al Real Decreto 137/1993 de 29 de enero por el que se aprueba el Reglamento de Armas, que en su artículo 147 establece que queda prohibido portar, exhibir o usar las armas bajo los efectos de bebidas alcohólicas, estupefacientes, psicotrópicos u otras sustancias análogas.
Asimismo, cazar o disparar armas desde un vehículo a motor también supone una infracción muy grave a la Ley 8/2003, artículo 78, que puede llevar consigo una sanción de entre 4.001 y 53.500 euros.