Crónicas Monteras 2011-2012 (II)

Continuo con la crónica.

Pero antes de hacerlo, le parece ver un cochino en el regato de abajo. Nos dejamos los ojos buscándolo, pero no vemos nada. El 7 vuelve a tirar, un sólo tiro, oyéndose el clásico ¡Flap!, lo habrá enganchado.

Me pasa el rifle, se toma un antibiótico y un ibuprofeno, y a los pocos minutos, lo oigo descansar.

Avanza la mañana y el aire sigue empeñado en aguarnos la fiesta. Siento mucho movimiento en la umbría, pero las 3 rehalas que iban por ahí deben andar todavía lejos, y la caza está aprovechando para irse aproximando al pico, carrileando, pero sin asomar, salvo alguna cierva incauta, que prefiero no tirar para no despertar a mi padre, y que vuelve a meterse dentro. Intento fijar los pocos claros que veo en esa zona, porque con el oído no voy a poder contar, y distingo 3 zonas más despejadas. Una de las veces oigo a unos cochinos pegarse, y se me ponen los pelos como escarpias. Pero no veo nada.

De pronto, las piedras suenan ya muy cerca, y veo unas orejas tiesas de cierva por lo alto del jaral. Me intento agachar para que no me vea, pero viene muy zorreada y directa a la trocha que tenemos justo a nuestra derecha a 5 metros, una de las más tomadas. Son esos segundos que se hacen eternos, intentando hacerse uno pequeñito, piedra de sal, pero atento a ver si viene algo más detrás. Cuando está llegando ve algo raro en el camino, y se para. La estoy mirando con el rabillo del ojo, no la sigue nada. Deseo que no pegue el tornillazo, pero lo pega. Pienso que va a ser peor el remedio que la enfermedad, así que la tiro en uno de los claros a escasos metros una sola vez, pero poco menos que un tiro "de sobaquillo" y el viento no me deja confirmar lo que pienso, que la he fallado.

Mi padre que se ha despertado sobresaltado se encuentra mucho mejor, así que a calentar banquillo. Pero como se oye mucha caza detrás, volvemos a dividirnos el campo de visión y le prometo avisar, cruce lo que cruce.

No tarda en asomar un vareto, muy largo. Disfrutamos viéndolo mirándonos extrañado. Termina por cruzar. Un par de ciervas lo hacen muy al fondo ya, y sentimos tirar al 5. Pero sigue oyéndose los ratos en los que el viento no azota nuestro costado, mucho movimiento dentro, y ninguna ladra. Intento comunicarme con el móvil para dar el aviso, pero la cobertura va y viene. Esperemos que los perros vengan cazando por la falda. Pero no cayó esa breva.

Aún así, en uno de esos azotes del viento, al girar la cabeza, veo como se nos intenta colar un cochino. Aunque aviso a mi padre rápido, no le da tiempo ni a verlo. "¡Qué listos son!" Lo esperamos en la bajada, donde lo sentimos romper monte, luego en el arroyo y luego en la subida, y no asoma nada de nada. Y con el viento ya no podemos oír por donde anda.

Volvemos la atención otra vez a la umbría, sin dejar de controlar de cuando en cuando las pedrizas de la solana. Un par de perros vienen con una ladra hacia nosotros. Tira el 5, la ladra sigue, se pierde, vuelven, otra ladra, y otra, y otra más, y otros por arriba con otra ladra. De los nervios. Las ciervas presienten la proximidad de los perros y no tardan en saltar una muy lejos, directa al 7 y otra que casi nos arroya. Según lo va a hacer, le manda mi padre una salva, que no le da, pega un salto en el camino, y va dirección a mi venado, donde la dispara otra vez, y aunque creemos que no la ha dado, ha girado a la izquierda, luego tendré que verlo. La cierva volaba literalmente por encima de las jaras, precioso. No da tiempo ni a recargar, porque en la solana del otro lado, hace aparición un venado muy aparente.

Va por las pedrizas, lejillos, bastante lejillos, con ese trote altivo y bonito de los grandes venados. Me parece ver que tiene un raspón entre el codo y la axila, pero el animal va como si nada, será de una jara. Mi padre lo apunta a conciencia, ¡PIM!, y el venado sigue como si nada, aprieta el paso y se pone al galope, ¡PIM!, y lo mismo. Juraría que el segundo le pegó en la caja de cambios, pero el venado como si nada. Está seguro de haberlo dado con los dos tiros, y me dice que lo remate que con esto del cambio al cerrojo no acaba de hacerse a recargar rápido. Así que dándome toda la prisa que puedo, y antes de que se meta en una zona muy apretada de monte, lo apunto un poco por delante del filo del cuello, y aprieto el gatillo justo cuando está entrando en la parte cerrada. Creo que también lo he enganchado, y de hecho, una ladra del perro que iba detrás de él no tarda en confirmárnoslo.

Le comento a mi padre lo la sangre que le he visto, pero él dice que no la vio. (Pero, si no vio a los perreros volver de la solana para atrás, como va a ver la herida mínima que traía. Eso sí, no quiere ir al oculista ni loco, antes morir que reconocer que se está haciendo mayor. ¡Qué cabezones se vuelven con los años!)

La montería sigue avanzando, y esperamos que los perros se metan delante nuestro, porque se vuelve a oír jaleo, pero los perreros no paran de llamarlos a la recogida en la esquina. Aún así, uno de ellos da con un rastro, y viene muy caliente jipando detrás de un rastro. Se para a escasos 15 metros del puesto latiendo de parado. El corazón en un puño, los segundos se vuelven horas. Acuden más perros, y a alguno vemos volar por encima de las jaras. Este no rompe. Y más perros. Al final lo arrancan hacia dentro, pero lo pierden, vuelven a dar con él, vienen hacia nosotros, lo vuelven a perder, ahora si, lo intentan agarrar, pero el lamento de uno de los perros que lo lanza al aire nos hace pensar que no se deja agarrar fácilmente. Todo esto a 20 metros. Al final lo vuelven a poner a correr y esta vez la ladra se pierde por el alto de la umbría, ¡qué emoción, qué pena!

Con los labios aún blanquecinos y cortados del momento anterior empiezan a desfilar algunos coches rumbo a la casa, cuando lo hace nuestro postor en uno de ellos recogemos y vamos a pistear y marcar las reses. Al primer venado de mi padre no soy capaz de ubicarlo por donde salió y entró. Cuando doy con las pisadas, no veo rastro de sangre en ningún sitio, aunque procuro meterme bastante dentro por la trocha. De mi cierva, tampoco hay rastros, pero si veo muuuuuuuchas jaras y maleza tronchada por el paso de las reses por la zona y el cochino que no quiso cumplir al camino. Bajo al arroyo como buenamente puedo y marco mi venado. 10 puntitas, y es curioso, porque de roseta está muy bien, gordita y perlada, pero el resto "estándar". Subo a ver el otro venado, y si en la bajada iba aprovechando las veredas de los cochinos, en la subida no hay quien dé con ninguna... Andan ya Luis y Grillo buscándolo, que han cobrado ya 3 venados y una cierva. El cochino, ni lo vieron... Llegamos a él, y vemos que le había dado un rasponazo entre codo y pecho, que aunque daba mucha sangre, no le impedía funcionar como si nada. Y también presentaba dos tiros en el costado, uno que le debió pasar rozando el corazón alcanzando los pulmones, y el otro un poco más trasero. Y el último, en el cuello. El venado es muy bonito, completo, de 12 puntas muy bien puestas. Afirman venir siguiendo el venado desde donde lo tiraron, así que no hay nada más que ver, apuntaos el cuarto también. "Tocayo, te hago un par de fotos, y nos bajamos de aquí antes de que nos rompamos la crisma, y además a ver como organizamos la llegada a la casa". Y todavía nos quedaba la subidita, que se las traía también.


Mientras intentamos ver como bajamos a la casa, le comento a mi padre lo de su venado, y aunque le da rabia, porque este año está fallando mucha caza y haber enganchado un venado tan lejos le hacia especial ilusión, la ley es la ley. El señor del 5 sigue buscando, y por lo visto le queda rato, en su puesto, que era bien bonito, y ya tiene unas cuantas marcas... Conseguimos bajarnos en la furgoneta de uno de los perreros acoplándonos como podemos y por el camino nos cruzamos primero con nuestro vecino de casa, que ha cobrado una cierva, y con Pini, que ha fallado un venado, con Dani, que no nos reconoce, pero que luego me comentó que falló dos venados en el cierre de la pedriza grande de la solana. Llegamos a la casa y cuando nos sentamos a comer por allí ya han pasado "las hordas" y nos damos por comidos con unos garbanzos y unos kiwis mientras vamos preguntando a unos y a otros. Café y naranja mientras buscamos como bajar al coche que lo tenemos en la entrada y esperamos a ver si llegan las reses de nuestra armada para que mi padre vea el venado que rematamos.

Cuando estamos para montarnos en los coches llegan las reses, y los chascarrillos con de los 3 Luises se suceden, ¡! Todavía queda caza por bajar, pero nosotros ya nos despedimos, que sino se nos va la persona que tan amablemente se ha ofrecido a dejarnos en nuestro coche.

Ya de vuelta, decidimos ir a San Pablo de los Montes a por unos zahones, pero una llamada de Juan Antonio hace que demos media vuelta y nos veamos con él, Willy y cía. Es estupendo volver a verlos después de tanto tiempo. Me tomo un cola-cao para entrar en calor mientras charlamos animadamente, un par de fotos para inmortalizar el momento.


Seguimos camino, que vamos a ver si acaso en Ventas apañamos algo, en vez de ir por la ruta más corta... Y vaya si apañamos, un bolso para mi madre, y mis zahones, ni olerlos, ¡jajajajaja! Ya lo sabía yo...

Llegamos a casa, confirmo con Arancha y con un amigo que estoy cansadete, que nos vemos en otro momento. Terminamos de recoger todo, duchita caliente y pijama, y aunque me da pereza me pongo a limpiar el rifle a conciencia, que está lleno de polvo del camino, mientras veo al Madrid ganar. 10 puntitos.

Recibo la foto del venado "de los 3 Luises" o también apodado "del desodorante" y mientras lo comento con mi padre me va entrando un sopor terrible.

Ya sólo nos queda un fin de semana.

Muy buena crónica Carlos, enhorabuena. Menudo día.

Enhorabuena Luis por los lances y tu venaete. Gracias por la crónica!!!

[quote="Morral"]Continuo con la crónica.

Buenisima cronica Luis! Gracias por compartirla con todos! una pena el venao de tu padre... pero aun tendra una oportunidad mas!

Como siempre muy buena cronica Luis, que placer volverte a ver y conocer a tu padre, haber si hay suerte y el año que viene cazamos juntos algunos dias.

Un abrazo

Estupendas crónicas Luis, Emilio y Carlos.

Morral escribió:

Ya de vuelta, decidimos ir a San Pablo de los Montes a por unos zahones, pero........

Seguimos camino, que vamos a ver si acaso en Ventas apañamos algo, en vez de ir por la ruta más corta... Y vaya si apañamos, un bolso para mi madre, y mis zahones, ni olerlos, ¡jajajajaja! Ya lo sabía yo...

En San Pablo es muy difícil que te compres unos zahones si antes no los has encargado porque como mucho sulen tener uno o dos de muestra.
Puedes encargarlos por teléfono dándoles las medidas tuyas y después si quieres te los pueden mandar a casa.

E.M.G. escribió:

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

Javier ¿qué le ves a las contraluchaderas del venao de Emilio?

Están diciendo a gritos que vayas al oftalmólogo.

Al final tendré que ir porque me pasa como con el venao de Morral: en la cuerna derecha la veo rota y en la izquierda también.

Holland escribió:

Morral escribió:

Ya de vuelta, decidimos ir a San Pablo de los Montes a por unos zahones, pero........

Seguimos camino, que vamos a ver si acaso en Ventas apañamos algo, en vez de ir por la ruta más corta... Y vaya si apañamos, un bolso para mi madre, y mis zahones, ni olerlos, ¡jajajajaja! Ya lo sabía yo...

En San Pablo es muy difícil que te compres unos zahones si antes no los has encargado porque como mucho sulen tener uno o dos de muestra.
Puedes encargarlos por teléfono dándoles las medidas tuyas y después si quieres te los pueden mandar a casa.

Esa era la idea, ver los que tuvieran de muestra y que me tomaran medidas. Que al final resulta que si me van a ser útiles.

Gracias por el consejo.

deperrillo escribió:

Al final tendré que ir porque me pasa como con el venao de Morral: en la cuerna derecha la veo rota y en la izquierda también.

Pues es posible que estén rotas, sobre toda la derecha porque la izquierda parece más que no le he salido; no se aprecie bien al estar tan de frente. En cualquier caso lo que me llama la atención de este venao es que si encuentro sus desmogues por separado en el suelo difícilmente pensaría que pertenecen al mismo venao.
Por cierto un tiro tan resolutivo como afortunado.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
[/quote]

A mi lo que me parece curioso es la cara de cochino que tiene ese venao

Holland escribió:

Pues es posible que estén rotas, sobre toda la derecha porque la izquierda parece más que no le he salido; no se aprecie bien al estar tan de frente. En cualquier caso lo que me llama la atención de este venao es que si encuentro sus desmogues por separado en el suelo difícilmente pensaría que pertenecen al mismo venao.

Holland,

no se aprecia bien en la foto pero tenía las 2 contraluchaderas rotas al igual que varias puntas de las palmas.......el mariconazo del deperrillo tenía información privilegiada....

Holland escribió:

Por cierto un tiro tan resolutivo como afortunado.

lo que pasa es que no ves el 2º.....

otra afoto:

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

Chivatooooo

deperrillo escribió:

Chivatooooo

Como decia aquel : Yo lenguaron no soy pero.... lo que vea lo parlo.

Enhorabuena por esos bichos.

deperrillo escribió:

Chivatooooo

¿Emilio, tienes esa misma foto pero tomada desde la cuerna izquierda?

deperrillo escribió:

¿Emilio, tienes esa misma foto pero tomada desde la cuerna izquierda?

ahí la llevas

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

E.M.G. escribió:

Holland,

no se aprecia bien en la foto pero tenía las 2 contraluchaderas rotas al igual que varias puntas de las palmas.......el mariconazo del deperrillo tenía información privilegiada....



[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

Después del oftalmólogo tal vez le tengamos recomendar visita a otro especialista.




Un lance intenso para un buen y bonito venao, de los que miras al cabo de los años y lo reconoces al instante.
Enhorabuena.

Y el de la izquierda, el del oftalmólogo.

Me tendré que comprar un par de gafas como las tuyas. Vista de lince

Yo cerré ayer la temporada en Navalvillar de Ibor. Se cazó la mancha "El Camorro" y el resultado fue un desastre ya que no había caza. En fin, una más de tantas muchas. El año que viene más y esperemos que mejor.
Hoy nos ha dado el día para descansar y saludar a algún forero. Esperemos haya tenido suerte y nos ponga esa/s buena/s crónica/s a las que nos tiene acostumbrado.

Bueno pues ayer en "Las Cortes" de Fregenal de la Sierra (Ba) a pesar de la calor el resultado fue de 30 javalies y 2 Venados, no hubo bocas pero guarros por un tubo, nos divertimos de lo lindo con los perros, terminando y de vuelta por los caminos no dejaban de mover guarros los canes.

Hoy en Salvatierra de los Barros (Ba) he cazado otra preciosa mancha mucha calor tambien, el resultado 30 javalies (uno seguro plata y seguro que alta) y tres navajeros mas.

Tambien han cogido uno mis perros un buen machete (gordo como un toronjo y sin boca) que deje que lo matara a cuchillo mi acompañante.

Bueno en Extremadura ya hemos terminado la temporada, la semana que viene terminamos y cerraremos en Portugal.

Venga esas crónicas!!! Que tengo ganas de ver como ha despedido la gente esta temporada!!