Tanzania

Pa ir entrando en materia un doblete no está nada mal ,el Sullivan los tendrá cuadrados pero vosotros trapezoidales ponerse a 10 metros de semejante bestia con la posibilidad de que te envista no es de cobardes,en primer lugar ya hay que confiar en la puntería de uno mismo y en segundo lugar de la puntería en momentos de tension y ya finalmente que el proyectil haga su trabajo y la bestia se muera antes de llegar a uno

llabanquetu escribió:

Pa ir entrando en materia un doblete no está nada mal ,el Sullivan los tendrá cuadrados pero vosotros trapezoidales ponerse a 10 metros de semejante bestia con la posibilidad de que te envista no es de cobardes,en primer lugar ya hay que confiar en la puntería de uno mismo y en segundo lugar de la puntería en momentos de tension y ya finalmente que el proyectil haga su trabajo y la bestia se muera antes de llegar a uno

No es para tanto. Éramos tres rifles, y uno de ellos, más bien una bomba racimo.
Si llega a ser un león, la cosa cambia. Ése sí acojona

Relato estropeando. Gustazo leerlo.

Patrillos escribió:

llabanquetu escribió:

Pa ir entrando en materia un doblete no está nada mal ,el Sullivan los tendrá cuadrados pero vosotros trapezoidales ponerse a 10 metros de semejante bestia con la posibilidad de que te envista no es de cobardes,en primer lugar ya hay que confiar en la puntería de uno mismo y en segundo lugar de la puntería en momentos de tension y ya finalmente que el proyectil haga su trabajo y la bestia se muera antes de llegar a uno

No es para tanto. Éramos tres rifles, y uno de ellos, más bien una bomba racimo.
Si llega a ser un león, la cosa cambia. Ése sí acojona

Patrillos  : el relato es de los que atrapan… promete tener más aventuras que Papillón …  

Pienso como llabanquetu… se entiende que la bomba racimo es el .577 NE de  M.S que pegará unos cebollazos de los que te despeinan hasta las cejas…

Un saludo

Hilario- escribió:

Relato estropeando. Gustazo leerlo.

Estropeando?

Patrillos escribió:

Hilario- escribió:

Relato estropeando. Gustazo leerlo.

Estropeando?

… Ese texto predictivo de San Google …

Otra entrega
Esto va por capítulos. Ya lo siento  pero es que es un curro, y como estoy de vacatas, y con el brazo enyesado  lo escribo a ratos.


LOS CEBOS
Ya teníamos carne abundante para cebar. Habíamos visto huellas aisladas de leones, algunas recientes y otras no tanto.
Decapitaron los búfalos para llevar las cabezas al skinner y los dos cuerpos restantes los partieron, cada uno, en dos mitades. Teníamos cuatro masas de carne considerables para cebar. De vuelta al campamento, tres de los cebos los dejaron, convenientemente atados para que no los arrastrasen, donde les pareció: en el suelo, en zonas de confluencia de cauces y sitios donde se pudiese hacer un blind en caso de que tomasen el cebo. La porción restante nos la llevamos al campamento.
Esa noche, cenando, le pregunté por la razón para no dejar los cebos colgados y ocultos con ramas, pues, en mi experiencia, otros predadores, y los buitres, acaban con la carne, por mucha que sea, en un suspiro. Me puso la típica cara de "qué cojones me está contando el tío este. Listo. Que es un listo".
El día siguiente lo pasamos buscando huellas de elefante, de león y, si de paso se terciaba, abatir algún antílope. A esas alturas ya nos habíamos dado cuenta que la escasez de antílopes era pasmosa. Allí había elefantes ( machos buenos poquísimos), leones (no los habíamos visto, sólo huellas) y búfalos. Y nada más: Impalas, redbucks, sables, kudus, wildbeast etc eran excepcionales.
Cuando ya, tarde, fuimos a revisar los cebos mis peores presagios se cumplieron: quedaban huesos dispersos mondos y lirondos. El calor, las hienas, los buitres, chacales, rateles, hormigas y mil criaturas más, no habían dejado nada. Noto como me pongo incandescente y le cae un chorreo al Sullivan. Nos intenta tranquilizar diciendo que nos queda medio búfalo en el campamento, y otro para matar, pues la licencia permite tres ( pagando cada uno, claro). A mí el mosqueo no me lo quita nadie y le tomo la matrícula. Mi amigo intenta mediar y contemporizar. Volvemos al campamento.
Cena con ambiente un poco sórdido. Tras la cena el tío se trinca su ensalada de cubatas de rigor y es un monólogo sobre la oda a si mismo, la envidia que le tiene todo el holding de la caza, los cojones que tiene para dar en el sitio exacto y en el momento preciso a un monstruo cargando, y lo buenas que están las asiáticas, pues son su debilidad. Conforme va metiendo más alcohol al buche yo le veo la cara más y más roja, y su discurso más y más incoherente
Amanece de nuevo. En su tienda suele sonar por las mañanas música Country. Salimos en el Toyota y cortamos un búfalo solitario que ha pasado no hace más de media hora, según los trackers (nunca he sabido cómo lo hacen). Tras un pisteo damos con él y mi amigo lo abate con el 470. El lance no tuvo mucho misterio. Unas fotos y no hay tiempo que perder, pues los días van pasando y solo hemos conseguido los búfalos.
Lo descuartizan en dos y ponemos tres cebos: Los dos del nuevo búfalo, y el medio búfalo que guardábamos. No me las voy a dar de experto, pero sí lo soy lo suficiente como para captar cuando se ponen cebos por si suena la flauta, sin analizar a conciencia emplazamiento y proximidad del agua. Me di cuenta de su estrategia: Los leones, a diferencia del leopardo, necesitan cebos grandes, y allí lo único grande que había era búfalos. No había elands, kudus, roan... Pretendía que matásemos los tres búfalos de la licencia para, cuando se agotase la carne, pagar a precio de oro abatir búfalos de forma extraoficial con la única función de cebar.
Una vez más se cumplió la predicción. En dos días, teníamos tres despojos, comidos por mil animales, y sin huellas de presencia de leones. El tío no se cortó. "Necesitamos más carne para cebar (búfalos) y los tenéis que pagar. Le dejé claro que sí yo me liaba a tiros por carne no iba a pagar a precio de trofeo. Me vino a contestar que allí el gallo del corral era él y que eso era así o así. Creo recordar que pedía 2000$ por búfalo para cebo (búfalo que luego no podría exportar), sea trofeo, ternero, hembra o medio pensionista. Tras cagarme en su madre varias veces, y con mi amigo siempre intentando evitar el derramamiento de sangre, le dije que como mucho 1000$ por una puta vaca para carne.
Amanece. Llevaríamos un par de horas en el Toyota cuando se nos cruzan 4 búfalos 100 metros por delante (un bufalito, dos hembras y un ternero). Paramos el TT. Bajamos con las armas guardando el mayor silencio posible. Pisteamos como media hora y, de repente, el moreno que abre camino (como no) se queda como un pointer de muestra señalando a un bosquete que tenemos delante. Yo no los veo. Sullivan tampoco, y mi amigo tampoco. Sólo el moreno, as usual. Pasan unos segundos y Sullivan los ve, y yo sigo sin verlos por unos segundos, hasta que distingo una negrura horizontal, signo inequívoco de que ahí está el cuerpo del animal (no sabía si macho o hembra), me echo el rifle al hombro mientras el pistero se tira al suelo a un lado. El búfalo desaparece antes de que me de tiempo a encararle las miras.
Tormenta. Sullivan me echa un chorreo como cuando un padre abronca a un chavalín de 10 años: que si esto es caza salvaje, que si hay que estar atento, que si hemos trabajado para nada...que si...que si...Con mi Spanglish le digo: "Mark. El primero que ha visto el búfalo ha sido el negro. Tú has tardado unos 5 segundos más porque eres más torpe que el negro, y yo unos 5 segundos más porque soy más torpe que tú. Yo soy oftalmólogo y puedo operar 10 cataratas en 3 horas. Tú crees que podrías operarlas en 6 horas?. Y del negro ni te lo planteo". Silencio sepulcral y careto de que me quiere matar. Le he desacreditado delante de su equipo.
Vuelta al campamento (aún no era ni mediodía) porque el señorito se siente ultrajado. Me echo una siesta y me duermo plácidamente cagandome en el Sullivan. Anochece. Mi amigo viene a mi tienda y me dice que hay un problema: Ha hablado con Sullivan y está enojado porque al pistero le ha faltado tiempo para echarse al suelo y dice que he llegado a apuntarle con el rifle. Por otra parte, dice que han hecho un trabajo ( conducir el Toyota, avistamiento, pisteo, etc), que no se ha visto culminado por mi tardanza en ver al búfalo. Mi amigo ve como muto a un color verdoso, como Hulk, e intenta frenarme, pero es inútil, salgo de mi tienda engorilado y voy a donde está el Sullivan con toda la peña. Le exijo que me explique cómo, a la vez, puedo ser muy lento en encararme el rifle y, pese a esa lentitud, al negro no le da tiempo de apartarse. La contradicción es tan obvia que se limita a rascarse el bigote. También le digo que conducir, guiarme, pistear y asesorarme es su trabajo. Trabajo que se corta el pelo a 1200$/día. A partir de ahí paso a hablarle en castellano: Me cago en él, en sus muertos, en su equipo, y le digo que se vaya a tomar por el culo, y que por lo que a mí respecta, se ha acabado el safari.
A la mañana siguiente no se cazó. No acudió a desayunar y se pasó el día en su tienda, supongo que con una buena cogorza.

CONTINUARÁ

Patrillos escribió:

Hilario- escribió:

Relato estropeando. Gustazo leerlo.

Estropeando?

Estupendo. No llevaba las gafas de cerca

Excelente relato Patrillos. Gracias por el esfuerzo de escribir en vacaciones.

Me cuesta entender que se pueda uno llegar a acercar a 10 metros a un búfalo al que se piensa disparar, y también pienso que la visión que describes de Sullivan de la caza como si fuera un duelo de pistoleros en un western, es un tanto desproporcionada. Para eso ya están los toreros por estos lares. Pero es bueno conocer la experiencia.

Una vez me dijeron que para ir de caza es necesario ponerse el sombrero de tonto, porque nunca sucede nada como te dijeron y siempre es mucho peor. Y como vas a divertirte pues no vale la pena enfadarse. Viendo la experiencia que nos relatas, no entiendo que este personaje siga teniendo clientela.

Pues nada, que esperando la próxima entrega.

Saludos y gracias,

cosario escribió:

Excelente relato Patrillos. Gracias por el esfuerzo de escribir en vacaciones.

Me cuesta entender que se pueda uno llegar a acercar a 10 metros a un búfalo al que se piensa disparar, y también pienso que la visión que describes de Sullivan de la caza como si fuera un duelo de pistoleros en un western, es un tanto desproporcionada. Para eso ya están los toreros por estos lares. Pero es bueno conocer la experiencia.

Una vez me dijeron que para ir de caza es necesario ponerse el sombrero de tonto, porque nunca sucede nada como te dijeron y siempre es mucho peor. Y como vas a divertirte pues no vale la pena enfadarse. Viendo la experiencia que nos relatas, no entiendo que este personaje siga teniendo clientela.

Pues nada, que esperando la próxima entrega.

Saludos y gracias,

Es que para entenderlo, hay que entender la forma en la que entiende él la caza, que es en un sentido trágico, heroico. Es o él o el animal. Uno de los dos ha de morir. Ese es su latiguillo continuo.
Fue posible acercarse porque íbamos a gatas, teníamos el aire de cara, y los búfalos se notaba que estaban poco cazados. En otras situaciones, en el Selous, etc, en cuanto barruntan algo raro salen pitando.
La visión que describo no es desproporcionada. Me quedo corto. Ya leerás más cosas.
Y lo de que siga teniendo clientela...pues bueno. Creo que anda por SA con cuatro despistados, matando búfalos medio de lata. Está muy desacreditado, aunque sigue teniendo ese aura de leyenda, que lo es.

Patrillos escribió:

cosario escribió:

Excelente relato Patrillos. Gracias por el esfuerzo de escribir en vacaciones.

Me cuesta entender que se pueda uno llegar a acercar a 10 metros a un búfalo al que se piensa disparar, y también pienso que la visión que describes de Sullivan de la caza como si fuera un duelo de pistoleros en un western, es un tanto desproporcionada. Para eso ya están los toreros por estos lares. Pero es bueno conocer la experiencia.

Una vez me dijeron que para ir de caza es necesario ponerse el sombrero de tonto, porque nunca sucede nada como te dijeron y siempre es mucho peor. Y como vas a divertirte pues no vale la pena enfadarse. Viendo la experiencia que nos relatas, no entiendo que este personaje siga teniendo clientela.

Pues nada, que esperando la próxima entrega.

Saludos y gracias,

Es que para entenderlo, hay que entender la forma en la que entiende él la caza, que es en un sentido trágico, heroico. Es o él o el animal. Uno de los dos ha de morir. Ese es su latiguillo continuo.
Fue posible acercarse porque íbamos a gatas, teníamos el aire de cara, y los búfalos se notaba que estaban poco cazados. En otras situaciones, en el Selous, etc, en cuanto barruntan algo raro salen pitando.
La visión que describo no es desproporcionada. Me quedo corto. Ya leerás más cosas.
Y lo de que siga teniendo clientela...pues bueno. Creo que anda por SA con cuatro despistados, matando búfalos medio de lata. Está muy desacreditado, aunque sigue teniendo ese aura de leyenda, que lo es.

Excelente relato Patrillos. D. Antonio: lo de ponerse el sombrero de tonto cuando se va de caza, lo grabo en el disco duro, es genial

Pues esa forma de entender la caza que la practique él, es desproporcionada y un tanto arriesgada diría yo… en cualquier caso, si quien paga soy yo… a 10 m no dejo acercarse ni a una vaca lechera, lo diga M.Sullivan o el Arzobispo de Canterbury…

Y por lo que dejas ver, sus mejores tiempos ya pasaron… algún día después de una buena curda, le fallarán los reflejos o el primer disparo y ya leeremos las noticias… aunque lo más probable es que no de lugar a ello,  porque le fallen los clientes…

Y nada, esperando la siguiente entrega…

Un saludo y gracias Patrillos.

[quote="Patrillos"]

cosario escribió:

Excelente relato Patrillos. Gracias por el esfuerzo de escribir en vacaciones.

Me cuesta entender que se pueda uno llegar a acercar a 10 metros a un búfalo al que se piensa disparar, y también pienso que la visión que describes de Sullivan de la caza como si fuera un duelo de pistoleros en un western, es un tanto desproporcionada. Para eso ya están los toreros por estos lares. Pero es bueno conocer la experiencia.

La visión que describo no es desproporcionada. Me quedo corto. Ya leerás más cosas.
Y lo de que siga teniendo clientela...pues bueno. Creo que anda por SA con cuatro despistados, matando búfalos medio de lata. Está muy desacreditado, aunque sigue teniendo ese aura de leyenda, que lo es.

No quería decir que la vision que describes sea desproporcionada sino que ese concepto de la caza me parece desproporcionado. Acepto que la caza es un duelo de "inteligencia versus instinto". Pero no considero que sea un duelo de poder a poder, entre otras cosas porque ese supuesto duelo se vería desvirtuado por el hecho de aparecer entre medias unos cartuchos de esos de .500 que mencionas. Tampoco me llena la caza disparando a 600 metros o mas porque ya no ves al animal y probablemente tampoco su instinto le permita defenderse a esa distancia.

En el tiro al vuelo entra otro factor determinante que es la habilidad para hacer blanco, lo cual, por mi propia experiencia, no es evidente.

Saludos,

MELENAS65 escribió:

Excelente relato Patrillos. D. Antonio: lo de ponerse el sombrero de tonto cuando se va de caza, lo grabo en el disco duro, es genial

Pues esa forma de entender la caza que la practique él, es desproporcionada y un tanto arriesgada diría yo… en cualquier caso, si quien paga soy yo… a 10 m no dejo acercarse ni a una vaca lechera, lo diga M.Sullivan o el Arzobispo de Canterbury…

Y por lo que dejas ver, sus mejores tiempos ya pasaron… algún día después de una buena curda, le fallarán los reflejos o el primer disparo y ya leeremos las noticias… aunque lo más probable es que no de lugar a ello,  porque le fallen los clientes…

Y nada, esperando la siguiente entrega…

Un saludo y gracias Patrillos.

Esa "fama" de  bebedor, temerario y prepotente ya le ha alcanzado, de ahí que esté desprestigiado por casi todos lados...

Saludos

Amigo Patrillos,
Aunque conocía parte de tu aventura con Sullivan, me lo estoy pasando muy bien leyendo tu relato. No pares!!!

Cuando dices:
Fue posible acercarse porque íbamos a gatas, teníamos el aire de cara, y los búfalos se notaba que estaban poco cazados. En otras situaciones, en el Selous, etc, en cuanto barruntan algo raro salen pitando.

Tienes mucha razón, pero hay un motivo más para que el segundo búfalo se quedara. El que murió primero, era el líder y estando acostumbrados a seguirle, los animales del rebaño esperan junto a él a que inicie la huida o el ataque. A mí me ocurrió algo muy similar en Gonarezhou (Zimbabwe), disparé al búfalo mayor a 150 mts con el 375H&H, corrió junto a la manada unos 100 mts, y se paró herido de muerte, le volví a disparar y cayó muerto. Pese a ello, la manada (una docena de animales) se quedó junto a él hasta que nos acercamos haciendo ruido a unos 50 mts. de ellos.
Un abrazo y buena caza amigo.
Orix

Ahí va otro.
Si la peli os cansa se dice. No es cuestión de abrasar


EL HIPOPÓTAMO INMORTAL
Ese día tocaba hipopótamo. Creo recordar que ya habíamos conseguido el leopardo y el elefante previamente.
Nos desplazamos a una zona alejada. Atravesamos varios valles. El calor, el sol y las moscas tse-tse colaboran en la tortura. Comenzamos a andar. Se adivina en el horizonte una zona boscosa, de vegetación densa (allí le llaman bush). Comemos terreno y confirmo mi impresión. Cambia totalmente el entorno y parece que nos hemos metido en un lugar recóndito del Amazonas.
Algunos tracker miran al suelo buscando huellas, y otros miran para todos los lados, buscando potenciales peligros. Tras un buen rato de marcheta, tampoco mucho, Sullivan nos señala una piedra grande, y le preguntamos qué cojones tiene la piedra de particular. Nos contesta que esa piedra significa que estamos adentrándonos en otra concesión ( para entendernos, como si fuese en otro coto), y que hacerlo nos iba a costar 2000$ más. Le contesto (por aquel entonces la máquina de llevarle la contraria era exclusivamente yo) que ya habíamos pagado pastizal extra por cazar en un área especial. Pone cara de que son lentejas, o las tomas o las dejas. Como el hipo lo iba a cazar mi amigo y dijo que sí, no seguí porfiando, pero nos la había vuelto a meter bien adentro.
Seguimos por aquel bosque de galería, endemoniadamente enmarañado. Lianas, charcos, reptiles que jamás había visto...como en las pelis. Seguimos un buen rato más, hasta que rápidamente todo el grupo se detuvo. Yo iba el último con el 458 Lott, porque al hipo le iba a tirar mi amigo, que llevaba mi 470. Me puse de puntillas intentando ver entre todas las cabezas que me precedían (pisteros, Sullivan y mi amigo). Pude ver un grupo de hipopótamos. Estaban en una charca que les cubría como un metro. Allí había de todo: machos, madres, crías, abuelos...Repentinamente Sullivan se echó el Heym al hombro. A mí me pegó una taquicardia, porque ese hombre si se encara el rifle en el 99% de las ocasiones tira. No tiró, pero el macho más grande hizo un amago de carga, y por eso se lo encaró.
Con lo fácil que habría sido decirle a mi amigo: "ese es el bueno. Tirale." No estaba a más de 20 metros. Pero no, siempre tiene que buscar el más difícil todavía, el suspense y el follón. Mantuvimos minutos de calma tensa. Se mascaba la tensión, hasta que el grupo de hipos optaron por huir entre tremendo estruendo y desconcierto. Desaparecieron de nuestra vista. Comenzó la tarea de pisteo, en este caso muy fácil porque el rastro era muy reciente, y la turbidez del agua indicaba el reciente paso del grupo. Tras no más de 20 minutos dimos con ellos de nuevo. Estaban encajonados contra un murete natural que tenía una pequeña cascada. A un lado un paredón infranqueable, y al otro lado el río, con no más de 2 metros de profundidad, se estrechaba, para luego ensancharse. Enfrente de ellos, nosotros. Era muy evidente su estado de excitación, cuando no furor, y dos machos, y una hembra con una cría, amenazaban continuamente con cargar.
En esas estábamos cuando el amigo Sullivan, toma su Heym de su portarifles, apoya la cantonera en sus pies, apuntando los cañones no sé si a su bigote o a su cerebro, en el optimista caso de que exista. Se da la vuelta, da la espalda a los hipopótamos con sus santos cojones, que estaban a 10-15 metros de él y ya de los putos nervios, chapoteando continuamente y visiblemente nerviosos, y no se le ocurre otra cosa que soltarnos un discursito: "I am Mark Sullivan. Hunting is a matter about to kill or die. This is the way I hunt and the entire world is jealous. Now shoot and kill the one of the left".
Él se apartó y mi amigo soltó dos pepinazos del 470 a la zona corazón -pulmones, aparentemente con efectos demoledores, y el animal quedó inmóvil, mientras el agua que lo rodeaba se iba tiñendo de rojo. El resto del grupo salió con estrépito por la garganta de la izquierda. Yo tenía una cefalea pulsátil en la nuca, y el 458 con el seguro quitado y cartucho en la recámara. Ese hombre es una máquina de crear situaciones de riesgo.
Me encontraba yo felicitando y abrazando a mi amigo (con el bigotes ya no me hablaba), cuando un tracker negro comenzó a vociferar señalando al hipo teóricamente muerto. Vimos como el animal se alejaba lentamente, aparentemente herido, porque se desplaza ladeado. Se montó un follón y una confusión morrocotuda, mientras todo el mundo nos apremiaba a que lo rematasemos. Analizamos la situación y mi amigo me transmitió su angustia pidiéndome ayuda para que no se escapase. Todo bicho tocado se paga, se cobre o no. Decidimos saltar ambos a la orilla opuesta, para correr de forma paralela al hipopótamo. Por fuerza tendría que pasar por una zona empedrada con apenas agua; un buen sitio para, si llegábamos antes que él, echar rodilla a tierra y cortarle el paso. Lo conseguimos y los dos estábamos preparados antes de que el hipo apareciese en la pedriza. En cuanto surgió le llovió una granizada de plomo de preocupar. Se llevó 8 tiros, algunos en su sitio y otros no tanto. Cuando llegamos a él parecía un colador chorreando sangre a borbotones por todos los agujeros. Se acercó el resto del personal y pusieron cara de sorpresa, y luego de disgusto. "Qué cojones pasa ahora?" Nos preguntábamos. Sullivan vino a explicarnoslo: Era otro animal, una hembra, y había que pagar 7000$ por su abate. El macho tirado en primer lugar estaba en su sitio, muerto. También había que pagar 2000$ por cazar en otra concesión, y, para más recochineo, nada de fotos, porque si luego circulaban, se podía deducir por el entorno donde se había cazado al hipo. En definitiva, que ya teníamos el culo con callo.
De vuelta cayó un tormentón de los que anuncian que entrábamos en época de cambio. Divisamos la pista de la avioneta desde el coche, a nuestro paso, y era una balsa.
Esa noche, y tras convencer a mi amigo, comuniqué a Sullivan que nos queríamos largar. Las lluvias cada vez se hacían más copiosas y frecuentes, y corríamos serio riesgo de comer las uvas de nochevieja en aquel rincón del mundo. Le conminé a que llamase a la avioneta, dudando seriamente si podríamos salir de allí, pues la pista era un lodazal.

CONTINUARÁ

Patrillos escribió:

Ahí va otro.
Si la peli os cansa se dice. No es cuestión de abrasar


EL HIPOPÓTAMO INMORTAL
....

CONTINUARÁ

Como suelo decir: Sarna con gusto no pica  

Sigue dándole a la tecla...  

Saludos y gracias  de nuevo por compartir tales experiencias.

Ahora que has cogido ritmo de crucero… no lo dejes…

Gracias por compartir semejantes experiencias y un saludo.

Muchas gracias por el relato, me abre una ventana a unas vivencias que nunca tendré, entre otras cosas porque siempre que gasto dinero tengo un disgusto. Vaya una facilidad y alegría con la que el ph añade dólares a la cuenta, parece cosa de magia.....
Me parece una maniobra muy sucia lo de los cebos, si como indica la lógica fue premeditada.....Lo de tirar la hembra puede pasarle a cualquiera, más aún con los nervios de la situación y siendo animales peligrosos.
Un saludo!

Menuda aventura y el yanki menudo jeta,furtiveado con clientes en concesiones ajenas raro me parece que nunca le hayan partido el jeto.

Patrillos la verdad que de anecdotas vas servido. Muy entretenido este hilo. Espero que continue.
Abrazo.

Gracias por compartir tus experiencias y viajes.

La última entrega.
Hay mil anécdotas que podría contar, pero no quiero ser cansino

LA TRACA FINAL
La avioneta tardaría en llegar un par de días. Yo cuanto más miraba el cielo, más negro lo veía.
Día de asueto, de recoger los bártulos, preparar la maleta, y de tratar el siempre espinoso tema de las propinas. Fue mi amigo, millonetis de profesión, a hablar del asunto. Cuando regresó a mi tienda me espetó un: "Joder. Me he quedado de piedra con el tema propinas". Cuando me dijo eso tomé asiento, porque si a él le preocupó a mí me podía dar un perrenque. Me soltó que sólo a Sullivan lo normal era aflojarle 8000$ (eso le dijo, otra cosa es que cuele). Aparte había que dar propinas a trackers, chófer, skinner, cocinero, personal del campamento, etc. Le contesté que para su culo un pirulo, y que yo más de 2000 no le daba, y que se lo daba exclusivamente por temor a no salir de allí, y que él le diese lo que le viniese en gana. Si no recuerdo mal, mi amigo, que por aquel entonces ya hacía de psicoterapeuta de parejas (Sullivan y un servidor), le aflojó 6000$. No sé si se mosqueó o no, porque vivía en un permanente "status mosqueótico".
Al día siguiente, y con serías dificultades, la avioneta tomó tierra. No sé si me lo pareció, fruto de mi inquietud, o fue real. Lo que sí fue real es que, para despegar, la falta de tracción por el barro, hizo que nos acercaremos muchísimo a la pantalla de árboles que eran la muralla vegetal donde terminaba la pista, y los libramos por un pelo. Eso sí es real, porque hasta lo comentó el piloto.
Por supuesto Sullivan volvía en nuestra avioneta, con su gesto adusto y apolíneo, siendo además el que más equipaje llevaba (lógico porque cerraba la temporada y había estado meses allí) y, por supuesto no pagó un duro por el vuelo. Lo pagamos mi amigo y yo (no tan lógico, porque no sé a cuenta de qué teníamos que pagarle los desplazamientos a esa garrapata).
Aterrizamos en la civilización. Bueno, en esa cochambre que es África, pero que te da la percepción de que uno regresa del cretácico a la era moderna. Nos dirigimos a un hotel bastante luxury con vistas al Índico (es el hotel en el que siempre que he ido a Tanzania me he hospedado). Entramos en la recepción y todo el personal entra en genuflexión y actitud de baboseo ante la presencia de Mr. Sullivan. Hay un problema (cómo no): sólo quedan dos habitaciones. Visto lo visto, prefiero compartir jaula con un mandril en el zoo de la ciudad, que compartir habitáculo con el Sullivan. De todas formas sobra el pensamiento: por supuesto una de las habitaciones es para su majestad, y la otra habríamos de compartirla mi amigo y yo.
Me niego. Quiero, y necesito estar sólo, para pensar, para hacerme una pajilla o para tirarme pedos. Le digo al recepcionista que el menda se da el piro. Mi amigo me intenta convencer para que me quedé, porque dice que parece que quiero alejarme de Sullivan. Le contesto que no lo parece, que es que ardo por poner tierra de por medio. Al final me convence, y compartiré habitación con mi amigo, pero hay un nuevo problema (ejem, que raro): la habitación sólo tiene una cama, y no es grande. Pueden poner una camita portátil de estas para niños. Le digo a mi amigo (1,85m) que en la camita duerme él.
Subimos a la habitación. Todas las mujeres con las que nos cruzamos nos parecen que están buenísimas, aunque sean truños. Es lo que tiene pasar una temporada sin ver féminas.
Nos duchamos. Organizamos nuestras cosas...y suena el teléfono. Coge mi amigo. Es Sullivan: que si bajamos a cenar con él en un rato. La madre que lo parió. Es como una lapa embadurnada con Loctite. Le digo a mi amigo que baje él y que le diga que estoy con la regla. El compi, que idolatra al Sullivan, casi se infarta, y me ruega por nuestra amistad que baje yo también: Que si ese feo no se le puede hacer...que si es Mark Sullivan (por mi como si es el hijo del coño la Bernarda), que si es una leyenda...que lo haga por él...En resumen, que al final claudico y bajo.
En África, como con las lluvias, no hay término medio, los hoteles, o son miserables y muy baratos, o son de lujo y carísimos, y la cena lo sería también, como el hotel.
Nos reunimos y nos sentamos. Yo ni le doy la mano. Estoy de él hasta los cojones. Nos pegamos un homenaje: carnes de la zona, langosta (la ponen fatal, con una mantequilla que le quita toda la gracia), viandas locales, etc. Tras la cena, "Predator" se pide su colección de cubatas. Agarra esa media castaña típica en él. Una medio castaña que le hace decir estupideces, pero no hasta el punto de soltar un dólar. Charleta y nueva oda narcisista hacia la esencia de la caza peligrosa que él representa (hasta cierto punto tiene razón, pero lo jode todo con lo gilipollas que es). El tiempo avanza y llega la hora de ir pensando en ir al catre. Se levanta solemne y nos da la mano a cada uno. "Thank you, sir. Thank you, sir. Has been a pleasure to share this time with you. Thank you for this amazing and great dinner". Y el tío se dió media vuelta, y se dio el piro haciendo alguna ese, sin soltar un chavo, y se largó.
Nos ha vuelto a sodomizar, le dije a mi amigo.
"Y qué quieres que haga?", Me contestó.
"Pues hijo. Yo, si me quieren dar por culo, me aprieto y me pongo de espaldas contra la pared. intento ponérselo difícil. Tú te agachas, te bajas los pantalones y calzoncillos, y le das la vaselina. Hay diferencias".
Regreso anodino a España.
Pese a lo que pueda parecer, recuerdo con cariño la experiencia. Compartí un safari con una leyenda, en su ocaso, de los safaris de caza peligrosa. Eso ya no me lo quita nadie.

Gracias Patrillos, por narrar estas experiencias y hacerlas tan amenas... yo no las voy a embadurnar diciendo lo que yo hubiese hecho y bla, bla, bla...

Desde luego, el tipo es como un circo de tres pistas … pero ¡ que os quiten lo bailado !

Y mi opinión sobre este  M. Sullivan a tenor de lo narrado: ya la he dado a lo largo de este excelente relato... pero como resumen, y como de todos es conocida mi afición al cine, en una escena de " Cita a Ciegas ", el jefe de Bruce Willis le dice a éste: " si estuviésemos en tiempo de guerra, te mandaría fusilar... TRES VECES ... " , pues eso...  

Gracias por contarnos el "making off" de un safari con esta "leyenda" que es Mark Sullivan... visto de que va, y sabiendo que los avituallamientos los hace con cubatas, no me extrañaría que algún día un búfalo le dé más cornadas que a Padilla, aunque se recuperará en el mejor hospital de la zona, sólo con lo que estafa o ha estafado a los clientes se lo podrá permitir   y si la recuperación no es completa, se podrá dedicar a contar a todo el mundo lo buen tirador que era y lo es, y lo buen Outfitter que era y lo es... quizá escribiendo un libro... así al leerlo, siempre podremos hacer una mueca y pensar,  que el tamaño de su boca y de las pelotas son inversamente proporcionales a los de su cerebro y su honradez profesional. Por cierto, la leyenda tiene ya casi 73 bellotas, y ya empezará a ser más dudosa su puntería tanto con los búfalos como con las asiáticas...   Eso sí, vende helados en el Polo Norte...

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Leyenda : Persona o cosa muy admiradas y que se recuerdan a pesar del paso del tiempo...¡ como para no recordarlo !

Un saludo

Una punta del 375 recuperada del primer búfalo, y otra del 577 de Sullivan, recuperada del segundo
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¿Puedes decirnos el resultado de los 21 días de caza, por favor?