El pasado domingo nos encaminábamos una vez mas hacia el Norte para montear junto con La Cabra la preciosa finca de La Encomienda del Moro. Tras un viaje amenizado por conversaciones y lances pasados con Venancio y David llegamos a Aljucén, donde nos esperaban el resto de rehalas. De ahí, llegada la hora partimos hacia la finca en cuyos portones paramos toda la caravana de canes para vestirnos adecuadamente antes de distribuirnos y entrar al monte.
Muy tarde, pasadas ya las doce y media de la mañana, nos daban la orden por la emisora de abrir los portones y soltar los perros, y sin dudarlo dimos rienda suelta a las pirañas, las voces no tardaron en escucharse en lo mas hondo de los barrancos y con ese solecito que buscábamos con ahínco en las primeras horas de la mañana comenzamos nuestra particular jornada.
La desaparición de los perros en el mar de jaras en busca de las reses nos alentaba y según caminábamos pegados a aquella hilera de eucaliptos se comenzaban a observar en el suelo los abundantes rastros de los jabalíes que indudablemente tenían que estar, aquello estaba todo literalmente “arado”.
Continuábamos andando y ya pasaban los 15 minutos de la suelta sin dar con los encames. Comentábamos la particularidad y extrañeza por lo que estaba sucediendo cuando uno de los punteros da de parado con el primer encame. A duras penas alcanzábamos a escuchar su voz alertando a los compañeros, permanecíamos quietos y en silencio a la espera de que la ladra llegase a oídos de los demás canes que por allí rebuscaban jara por jara y así fue. Poco a poco se le sumaron fuerzas a la ladra y rompieron el encame. Poco tardaron en sucederse los disparos en la primera traviesa.
De ahí en adelante las ladras se fueron sucediendo con mas asiduidad, la tensión crecía por momentos y los disparos resonaban difuminados con la fuerza del intenso viento que nos impedía escuchar con claridad lo que estaba aconteciendo.
La mañana transcurría y continuábamos moviendo cochinos, la mancha apretada de aulagas y jaras no impedía con su dureza que continuásemos disfrutando y fue donde chocamos con el resto de las rehalas donde se produjeron la mayor intensidad y cantidad de ladras, los jabalíes se habían concentrado en aquella hoya y no dudaron los canes en sacarlos, los disparos en las posturas cercanas se precipitaron por momentos y aquello estaba resultando una auténtica fiesta.
A la vuelta una paradita en una de las charcas de la finca para que los perros recuperasen fuerzas y un cigarrito antes de afrontar el último tramo de la montería, había que apretar la vuelta ya que sabíamos que algunos cochinos habían tomado ese camino.
Tras repostar, comenzamos el último empujón hacia los remolques, quedaba cazar de un tirón el filón hasta la primera traviesa y el último hasta los coches, dos tramos apretados de jaras, y no fue nada mas entrar cuando dieron con una cochina que empujamos hacia las posturas cumpliendo con nuestro cometido. Al llegar a la primera traviesa, yacía en el borde del camino, felicitaciones y sin pensarlo nos metimos en el siguiente filón.
No habíamos hecho mas que entrar cuando pasa el camión de las cárnicas y el conductor reconoce al morito, se para y da marcha atrás hasta nuestra altura y nos pregunta el número aproximado de reses abatidas, en esas andaba cuando una de las pirañas da de parado con un cochino, se despide el conductor del camión cuando Venancio le dice:
-¡ “Cucha”, espérate y te llevas ya cargado ese!.- en tono jocoso.
La cosa se lía, la ladra se forma y el cochino que rompe hacia nosotros, rápidamente nos abrimos, David Corre hacia delante, Venancio hacia arriba y yo salgo como un balín al borde del camino a cortar la carrera del cochino, sin pensarlo y sin tiempo me topo, literalmente con el, se frena a unos metros de mí y le hace cara a los perros, pero sin pensarlo comienza la persecución del cochino a un perro verdugo que lo acosa, se ha frenado y el equipo se le echa encima, el agarre es inminente, aguardo mientras el cochino sacude a diestro y siniestro, pero llegan los alanos y ahí ya no hay color. Ahora si, me arrimo y saco el cuchillo y lo mancho hasta el cabo, me separo unos metros y llega Venancio con la lanza y repite la operación, por si acaso.
Dejamos que los perros muerdan mientras comentamos que hay que ver como se ha ido el del camión sin su cochino, que resultó ser cochina, continuó Venancio la marcha llamando los perros mientras nosotros quedábamos allí para sacar la cochina al camino, donde aprovechamos para otra fotillo antes de emprender el último arreón montero.
Tras comprobar que allí no quedaba ningún perro nos metimos en la mancha y no habíamos andado ni un centenar de metros cuando daban con otro cochino a parado, lo corrieron varias veces y al final fue apresado también, aunque no hizo falta rematarlo ya que los perros se encargaron de el antes de que llegásemos al agarre. El final de la montería era tangente y al llegar al remolque comenzamos con la recogida y el conteo de canes, todos excepto uno que no tardó mas de quince minutos en aparecer, un par de perros cortados que solucionamos sobre la marcha y punto final a la jornada, recogimos todo y nos encaminamos hacia la junta, hoy comeríamos caliente.
Una jornada mas para el recuerdo, una de esas con sabor a monte y olor a jara y a sangre, una de esas que como dice nuestra querida amiga Ana, te deja, con ganas de más.
Jarillo Posta Lobera
Mensajes : 4116 Fecha de inscripción : 06/04/2011 Edad : 43
Bonita crónica, Carlos. La verdad que cazar con los perros no tiene color si lo comparas con estar en una postura.
Ni CALOR tampoco... Bonita crónica, Kas.
_________________ Imposible es sólo un estado de ánimo. Vive tu vida de tal manera que cuando tus pies toquen el suelo por la mañana, hasta el Diablo se estremezca y diga...."¡¡¡Hostiaaaaa... Este tío ya se levantó....!!!
Morral 2ª
Mensajes : 1835 Fecha de inscripción : 23/03/2011 Edad : 40
Que bonito tiene que ser tener tu propia rehala , abrir los portones de la fregoneta , patear y buscar encames....sin duda, lo prefiero mil veces a estar sentado esperando el lance, que también es divertido y me gusta!!
jumevi Vieja Gloria
Mensajes : 2455 Fecha de inscripción : 20/03/2011 Edad : 66
Enhorabuena David y Carlos, muy buenas las cronicas, voy a limpiarme que con la de Carlos se me a quedado en la ropa el olor ya jara y esa viscosidad y adherencia que tienen las mismas.
EBP Vieja Gloria
Mensajes : 2391 Fecha de inscripción : 02/01/2012 Edad : 52
Que bonito tiene que ser tener tu propia rehala , abrir los portones de la fregoneta , patear y buscar encames....sin duda, lo prefiero mil veces a estar sentado esperando el lance, que también es divertido y me gusta!!
estamos deacuerdo que cazar con los perros tiene que ser muy gratificante, a mi pesonalmente ni me gusta ni me disgusta, pero me llama mucho la atencion el que a casi todo el mundo le guste mas entrar con los perros que estar en el puesto, y es algo que me resulta sumamente raro... ( y ojo que no estoy haciendo de menos a cazar con los perros)
Jarillo Posta Lobera
Mensajes : 4116 Fecha de inscripción : 06/04/2011 Edad : 43
Vito es que ir con los perros significa estar en tensión todo el día. Ves salir y correr la caza, ves trabajar a los perros, pateas el monte, y puedes hablar, dar voces más bien. Cosas, y sobre todo la última, que en el puesto rara vez se dan.
DAVID H. Vieja Gloria
Mensajes : 4969 Fecha de inscripción : 20/03/2011 Edad : 49
estamos deacuerdo que cazar con los perros tiene que ser muy gratificante, a mi pesonalmente ni me gusta ni me disgusta, pero me llama mucho la atencion el que a casi todo el mundo le guste mas entrar con los perros que estar en el puesto, y es algo que me resulta sumamente raro... ( y ojo que no estoy haciendo de menos a cazar con los perros)
A mi solo de pensar las palizas que os meteis rompiendo jaras me dan los siete males, me quedo con el puesto sin duda.
santitos 1ª
Mensajes : 2102 Fecha de inscripción : 11/01/2012 Edad : 44
A mi me es igual de gratificante entrar a montear con mis perros y rematarles un cochino a cuchillo,que matarselo cuando me lo meten al puesto tras en una intensa ladra,pero hay que reconocer que es más sacrificado el entrar al monte con los perros.
JVPESTOREJO 00
Mensajes : 2824 Fecha de inscripción : 23/03/2011 Edad : 57
Pues a mi que os voy a contar.....Mi verdadera pasion es entrar con los perros en la mancha es una sensacion preciosa que mas de uno deberiais probarla yo disfruto mucho en el monte con los perros, y disfruto mucho mas cuando estos vienen bien ensagrentados comprobando que le han matando los bichos, vamos que han cumplido su trabajo.
BUFALO Administrador
Mensajes : 5600 Fecha de inscripción : 25/03/2011 Edad : 48
y puedes hablar, dar voces más bien. Cosas, y sobre todo la última, que en el puesto rara vez se dan.
Hablar si, dar voces nunca... Las voces las dan los perreros cuando tienen que darlas y lo que es más importante, se callan cuando tienen que callarse
Muy importante. Ni guias ni acompañantes vocean ( solo en momentos muy concretos). Solo vocea el perrero que como bien dice Raimundo tambien debe saber cuando callarse.
Jarillo Posta Lobera
Mensajes : 4116 Fecha de inscripción : 06/04/2011 Edad : 43
y puedes hablar, dar voces más bien. Cosas, y sobre todo la última, que en el puesto rara vez se dan.
Hablar si, dar voces nunca... Las voces las dan los perreros cuando tienen que darlas y lo que es más importante, se callan cuando tienen que callarse
Muy importante. Ni guias ni acompañantes vocean ( solo en momentos muy concretos). Solo vocea el perrero que como bien dice Raimundo tambien debe saber cuando callarse.
Las veces que entro con los perreros, algún "ANDA CON ÉLLLLLLLL, ARRIBA,ARRIBA....." se me escapa. Es que no puedo contenerme. y más cuando ves salir a , es lo más de lo más.
DAVID H. Vieja Gloria
Mensajes : 4969 Fecha de inscripción : 20/03/2011 Edad : 49
Nos estamos desviando del tema de las cronicas, si quereis se habilita un post como " vivencias de una rehala" o como comportarse cuando se va con los perros"
Morral 2ª
Mensajes : 1835 Fecha de inscripción : 23/03/2011 Edad : 40
Resumo lo máximo posible 3 de las 4 salidas de la semana pasada, por falta de tiempo, para no aburrir en exceso y por no dar más información de la necesaria. Con la otra me extiendo un poco más. Perdonad también la calidad de las fotos y de vídeos, la mayoría son del móvil.
La cosa empezó fuerte cuando finalmente me llama un amigo al principio de la semana para decirme que me apañe como pueda, pero que cuenta conmigo para acompañarle a su finca familiar. El escaqueo de casa sin morral ni nada, antológico... Madre mía, que stress todo el día pensando que lo que debía estar era estudiando, como me pillen... ¡JAJAJAJA! Como los niños pequeños que saben que están haciendo algo malo y les da la risa, pues eso... La finca, de la cual sólo había oído hablar, preciosa. En el puesto apenas dio tiempo para pasar frío. Nos divertimos un montón. Varias piaras de cochinos fueron cumpliendo y al final creo que se quedó con 6. ¡Y yo sin cámara! Pero aquello fue un espectáculo, un tiroteo constante sabiendo que sólo era a cochinos, y en finca abierta. Las rehalas eran, además de conocidas, muy buenas, y movieron muy bien la caza. Yo tiré en una ocasión en un lance muy rápido, en el cual me hice con un machete. Otra de las veces me entró una cochina con varios cochinos, que aunque no eran pequeños, sabes que son la última paridera de la cochina que ya estaba a punto de parir la siguiente. Los dejé pasar y devolví el rifle. Iba de mirón, y, como tal me lo pasé de miedo. Y luego rápido para casa, que la tarde tenía que aprovecharla.
El jueves me levanté cantando, tenía que apurar el día a tope, que sino no salen los temas. Al final recogemos a última hora de la tarde a mi padre a la salida de una conferencia en el hospital y rumbo Sur con el termómetro marcando -6ºC en algunos sitios... Me apetece muchísimo, por el sitio al que vamos, por las personas que voy a ver y porque en esta ocasión nos acompaña mi madre, que al final, se lo acaba pasando igual o mejor que nosotros. Allí ya nos esperan nuestros anfitriones y amigos, que ya están terminando de cenar. El ambiente es estupendo, y es que esta familia siempre recibe muy bien. Después de una cena riquísima, entramos en materia. Copa, puro, partidita de mus, poquer, tablao flamenco, etc. Si nos descuidamos no nos acostamos. El día se levanta despejado, pero con mucho frío y viento. Aunque en esta ocasión no tuve suerte cinegéticamente hablando, mi padre si, pero con escasa fortuna, aunque no se dio nada mal el día en general. Os dejo el resto de la crónica de ese día en este vídeo, incluido el rezo tan peculiar.
CONTINUARÁ...
gonso 4ª
Mensajes : 1294 Fecha de inscripción : 21/03/2011 Edad : 53